Mamá Cultiva Argentina Cumple 5 Años: La Historia y Cómo Apoyar su Lucha

Si te interesa el cannabis, los derechos humanos o las libertades civiles, probablemente hayas escuchado hablar de Mamá Cultiva.

Hoy, una de sus ramas, y probablemente la más relevante a nivel regional, Mamá Cultiva Argentina, cumple 5 años de vida, lucha, activismo, compromiso, y educación.

La Historia

Todo comenzó en Chile, con la primera de las muchas filiales en toda América.

El activismo se contagió rápidamente al país vecino de Argentina, que tiene casi el triple de la población de su contraparte del oeste. Así fue como nació Mamá Cultiva Argentina. Ésta es la delegación más grande de la organización, que se separa de la línea fundadora pero conserva su nombre.

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Esta fundación sin fines de lucro se dedica a ayudar a quienes padecen afecciones como epilepsia, cáncer y otras patologías, a lxs cuales la medicina tradicional les ha fallado. La organización lxs asiste y guía, ayudándolxs a navegar los relativamente inexplorados territorios del uso de cannabis medicinal en Sudamérica. Además, promueve el autocultivo y la educación con respecto a la marihuana medicinal.

Hechas desde abajo

Desde sus inicios en el 2016, Mamá Cultiva Argentina ha ayudado a decenas de familias a mejorar drásticamente la calidad de vida de sus niñxs y otrxs integrantes. De esta manera ocupan el lugar que deberían tener sus gobiernos.

Lo que es más, muchxs adjudican a estas valientes madres la legalización del cannabis medicinal en Latinoamérica, particularmente en Argentina. Su activismo y su coraje al poner en juego su libertad verdaderamente han impulsado al movimiento.

Esta lucha no ha pasado desapercibida por el público internacional. Mara Gordon, la fundadora de Aunt Zelda de Estados Unidos, es una emprendedora de cannabis criada en Texas. Se la suele considerar como una de las principales expertas en la investigación y el desarrollo de cannabinoides. También es reconocida en todo el mundo por sus años de actividades filantrópicas en este ámbito. Y forma parte de la junta asesora de la muy respetada Fundación Daya en Chile, que trabaja codo a codo con Mamá Cultiva. Por lo tanto, Gordon está muy familiarizada con las actividades de la fundación y su peso político.

“Mientras la prohibición del cannabis está siendo derribada alrededor del mundo, no hace falta mirar más lejos que a los esfuerzos comunitarios de grupos como Mamá Cultiva”, comenta. “Pelean para que sus seres queridos puedan cultivar y hacer su propia medicina. Este es un movimiento desde abajo que ha dominado en Latinoamérica”.

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Un obstáculo en el camino

Actualmente las filiales de Mamá Cultiva ofrecen talleres, cursos, capacitaciones y seminarios. Esto es además de la asistencia general a quienes buscan educarse con respecto a la medicación con cannabis y al autocultivo. La mayor parte de los países de la región ha legalizado el cannabis medicinal. Aún así, los productos no son accesibles para la vasta mayoría de la población.

“El autocultivo sigue siendo una deuda que los gobiernos tienen con sus sociedades. Sigue siendo penalizado en la mayor parte de los países latinoamericanos” explica Gabriela Cancellaro, directora de comunicaciones de Mamá Cultiva Argentina.

Pero, con la irrupción de la pandemia de coronavirus, se han visto obligadas a cesar la mayor parte de sus actividades. Y con este cese también se ha detenido su principal fuente de ingresos, abocado a mantener viva su misión.

Buscando soluciones creativas, las madres de Mamá Cultiva comenzaron a realizar videos educativos en Instagram y cursos online. En ellos se desarrolla una gran variedad de temas, desde autocultivo hasta filosofía cannábica.

“En tiempos de pandemia, nos trae tranquilidad saber que contamos con nuestras terapias en el patio de casa”, dice Valeria Salech, fundadora de Mamá Cultiva Argentina. “Cobra mayor importancia la autonomía sanitaria que nos trae el autocultivo de marihuana para nuestra salud.”

Pero como es de imaginarse, en medio de la crisis su situación ha llegado a un nivel crítico.

Hoy más que nunca estas guerreras por la justicia social necesitan de nuestra ayuda.

Sabemos que en estos tiempos inciertos a todxs nos aprieta el bolsillo. Pero si eres una de las personas para las cuales la economía hoy no es un problema mayor, te rogamos que colabores con esta causa. También puedes formar parte de esta comunidad con un aporte mensual. Así podrás continuar ayudando a incontables familias y luchando cada día porque todxs tengamos acceso al maravilloso cannabis medicinal.

“Estamos trabajando fuertemente para repensarnos en este contexto, y poder seguir acompañando a quienes inician este camino, con compromiso y responsabilidad. Porque creemos que en la sociedad que vendrá ya no pueden quedar dudas de que el cannabis debe ser legal”, concluyó Salech.

Artículo por Javier Hasse, Marian Venini y Natalia Kesselman.

Vía Forbes, traducido por El Planteo.