Cómo LowKey M30 Llegó a Las Grandes Ligas: ‘Solía Caminar Descalzo… Pronto, mi Sesión con Bizarrap’

“Ver gente de mi aspecto en la televisión realmente me inspiró”, reflexiona LowKey M30, recordando un viaje que lo ha llevado desde calles de Santo Domingo hasta el corazón de la escena musical urbana en Massachusetts. En este nuevo mundo, LowKey M30 no solo ha emergido como rapero, sino también como un narrador profundo y un artista visionario.

La narrativa de LowKey presenta un crisol de identidad cultural, luchas personales y el increíble poder de creer en uno mismo. Nacido en la República Dominicana, un país con una rica herencia musical, sus primeros años estuvieron atravesados por los ritmos del merengue y la bachata, enseñándole el potencial expresivo ilimitado de la música. “Hay muchos sentimientos, especialmente en la bachata, estás volcando tu corazón a tu alma gemela”, revela.

El salto de la colorida vida de Santo Domingo a Estados Unidos marcó una fase transformadora en el viaje de LowKey. No fue solo una reubicación, sino un profundo cambio de perspectiva, abriendo un reino de posibilidades infinitas. Esta marcada transición de sus modestos comienzos a la riqueza de oportunidades de EE.UU. fue impactante. “Solía caminar descalzo. Intento incorporar todo lo que he pasado para que la gente pueda conocerme. Intento mostrarle a personas de mi misma experiencia que todo es posible si te mantienes sólido y crees en ti mismo, puedes lograrlo”, recuerda.

En EE.UU., LowKey descubrió su verdadera vocación. Expuesto al mundo de los videos musicales estadounidenses en MTV, un lujo desconocido en su vida anterior, se encontró cautivado. La maestría, las narrativas convincentes y la representación de personas de color en estos videos hicieron más que entretener; encendieron una chispa de inspiración en él. “Saber que se puede hacer” se convirtió en un mantra orientador, alimentando su ambición y impulsando sus empeños creativos.

Las influencias musicales que han dado forma a LowKey M30 son tan diversas como el viaje en el que se ha embarcado. Desde los ritmos dominicanos de Juan Luis Guerra, Anthony Santos y su primo Quinito Méndez, hasta los ritmos dinámicos de Tego Calderón y Daddy Yankee, su paleta musical es rica y ecléctica. Sin embargo, no son solo los artistas latinos los que han dejado una marca en su estilo. Iconos como Eminem, 50 Cent, Dr. Dre y 2-Pac también han tenido un impacto significativo, fusionándose a la perfección con su herencia latina para forjar un sonido inconfundiblemente suyo.

Uno de los momentos destacados en la carrera de LowKey lo marca su reciente colaboración con Jim Jones, un testimonio de su adaptabilidad y su capacidad para conjurar magia en el momento. Sus ojos se iluminan al recordar la experiencia. “Fuimos a un estudio y Manny [fundador de la marca de cannabis High Tolerance] dijo que Jim podría participar en una de nuestras canciones”, recuerda, el recuerdo aún vívido y vivo. La sesión fue espontánea, un crisol de creatividad y respeto mutuo. “Estábamos allí vibreando… fumando un poco de ese porro de High Tolerance”, dice, recordando un espacio donde la expresión artística era desinhibida, libre de las restricciones de expectativas o nociones preconcebidas.

‘Desde que Empecé a Fumar… Se Expandió mi Mente’

La narrativa de LowKey M30 se extiende más allá del ámbito de la música, adentrándose en aspectos más personales de su vida que han influenciado significativamente su trayectoria artística. Central en esto es su relación con el cannabis, no solo una actividad de ocio, sino un elemento clave en su proceso creativo. “Desde que empecé a fumar… se expandió mi mente”, comparte abiertamente, reconociendo el profundo impacto que esta hierba ha tenido en su visión artística. Para LowKey, el cannabis es mucho más que una búsqueda recreativa; es una fuente de inspiración, una herramienta que abre puertas a nuevas perspectivas inexploradas en su música y letras.

La incursión inicial de LowKey en el mundo del cannabis no es solo un recuerdo casual, sino un capítulo crucial en su vida. El artista ofrece un vistazo sincero a este viaje personal: “Historia curiosa, la primera vez que realmente fumé fue cuando estaba con Manny. Fuimos a la misma escuela media y secundaria y empezamos a fumar en noveno grado”, relata con un toque de nostalgia. Esta experiencia, compartida con un amigo cercano, no fue solo una iniciación al uso del cannabis, sino un momento definitorio que influyó significativamente en su proceso creativo, marcando el comienzo de una exploración en nuevos reinos de creatividad.

Su postura sobre la legalización del cannabis está informada por sus experiencias personales y una profunda comprensión de su impacto más amplio en la sociedad. “La legalización del cannabis es una de las mejores cosas que ha pasado”, afirma con firmeza, reconociendo las injusticias históricas vinculadas a su criminalización. LowKey ve el cannabis como algo más que una sustancia; lo ve como un vehículo para el empoderamiento económico y la justicia social, particularmente en la reparación de los efectos desproporcionados de la Guerra contra las Drogas en las comunidades negras y latinas.

Más allá de su pasión por la música, LowKey M30 está profundamente comprometido con el bienestar y el avance de su comunidad. Aboga por iniciativas proactivas para guiar a los jóvenes hacia caminos positivos. “Siento que como comunidad básicamente necesitábamos hacer más cosas por la comunidad para que la comunidad no se convirtiera en narcotraficantes. Abrir más gimnasios para que los niños puedan encontrar su talento, abrir más espacios artísticos”, sugiere, imaginando un futuro donde los jóvenes tengan acceso a oportunidades que les permitan explorar y nutrir sus talentos, lejos de las trampas de influencias negativas.

En el corazón de la filosofía de LowKey M30 hay un foco en la importancia de la presencia mental y el compromiso en cada esfuerzo. Extrae sabiduría de sus extensas lecturas, compartiendo una lección clave: “Eso es lo que he aprendido de muchos libros, simplemente estar presente. La mayoría de las cosas en la vida simplemente tienes que aparecer. Una vez que apareces y estás allí y haces tu debida diligencia, estás listo”. Esta creencia es un reflejo de su enfoque de la vida y la música, subrayando el valor de la dedicación, la importancia de estar completamente comprometido en el momento y el poder transformador de presentarse, no solo físicamente, sino con todo su ser.

‘Siempre Hablé Español’

La historia de LowKey M30 es un relato convincente de equilibrio e integración, un viaje de mantener la identidad cultural mientras se abrazan nuevos entornos. Trasladándose a EE.UU. a una edad temprana, enfrentó el intrincado desafío de preservar su herencia dominicana en medio del diverso paisaje cultural de América. “Siempre hablé español porque crecí con mis padres”, recuerda con cariño, subrayando la profunda importancia de mantenerse conectado con sus raíces. Su herencia dominicana no era solo un trasfondo; era una fuerza guía, una brújula que dirigía su viaje artístico. “Siempre incorporo la parte dominicana de mí en toda mi música”, afirma con orgullo, ilustrando cómo su doble identidad coexiste armoniosamente en su trabajo.

LowKey observa atentamente la escena de la música urbana latinoamericana, un mosaico vibrante de sonidos y narrativas. “La forma en que lo veo es que les está yendo muy bien a los artistas latinos”, comenta, notando el creciente protagonismo de los músicos latinos en el escenario mundial. Artistas como Bad Bunny, que representan la autoexpresión sin miedo, resuenan profundamente con él. Simbolizan una nueva era de superestrellas latinas, trascendiendo los límites de la mera musicalidad para convertirse en íconos culturales, redefiniendo el paisaje musical con su mezcla única de talento y autenticidad.

En medio de este dinámico telón de fondo musical, LowKey M30 sueña con colaboraciones que trasciendan las simples asociaciones musicales, imaginándolas como ricos intercambios culturales. A la vanguardia de sus aspiraciones está una sesión con Bizarrap, conocido por sus colaboraciones electrizantes. “Pronto conseguiré mi sesión con Bizarrap”, declara LowKey, su voz impregnada de emoción y determinación. Para él, esto es más que una simple colaboración musical; es una convergencia de mentes creativas, una fusión de almas artísticas.

Reflexionando sobre su pasado, LowKey no pasa por alto los momentos significativos que lo han moldeado. Recuerda sus días de escuela secundaria, un momento en el que sus aspiraciones musicales comenzaron a cristalizarse, y el impacto de su amigo Manny, quien vio su potencial desde el principio. “Me dijo, escucha hermano, solo ten en cuenta que si yo lo logro o tú, siempre te tengo”, recuerda LowKey, destacando el papel crucial de la lealtad y el apoyo mutuo en su camino hacia el éxito.

Sus años universitarios representan otro capítulo crucial en su viaje, un período marcado por el aprendizaje y el desarrollo artístico. “Aprendí cómo lidiar realmente con la música. Aprendí a grabar música”, comparte, subrayando el papel de la educación en la refinación de su arte. Estas experiencias fueron más que simples pasos hacia una carrera profesional; fueron los bloques de construcción que moldearon al artista y al hombre que se ha convertido.

Sin embargo, el camino de LowKey no ha estado exento de dificultades. Un grave accidente en 2008, en el que cayó de un techo y sufrió lesiones significativas, se erige como un severo recordatorio de la imprevisibilidad de la vida. “Me fracturé la pelvis y las vértebras”, relata, un testimonio de su vulnerabilidad. Sin embargo, este evento no apagó su espíritu; más bien, encendió una determinación más feroz, impulsándolo a perseguir su pasión con aún mayor celo y fervor.

‘Sé Tú Mismo’

LowKey M30 visualiza su legado con claridad y profundidad, aspirando a ser recordado como un faro de resiliencia y una firme autoconfianza. “Como alguien que nunca se rindió y se mantuvo firme y creyó en sí mismo”, desea ser recordado, un sentimiento que refleja su espíritu tenaz y su determinación duradera. Su aspiración trasciende el mero logro personal; se trata de encender una llama de creencia y posibilidad en los demás. “Solo saber que no estás loco. Lo que piensas, puedes hacerlo realidad”, declara apasionadamente, impartiendo un poderoso mensaje de esperanza y perseverancia.

Su consejo para los artistas emergentes, especialmente aquellos de herencia latina, es tanto sincero como perspicaz. “Sé tú mismo. Siempre mira al espejo y asegúrate de agradecer a Dios todos los días y simplemente estar presente”, aconseja. Esta sabiduría, nacida de sus propias pruebas y triunfos, subraya el papel crucial de la autenticidad y la gratitud al navegar un camino plagado de obstáculos y distracciones.

El viaje de LowKey M30 es una narrativa rica que entrelaza el éxito musical, la fusión cultural y la evolución personal. Su transición de la República Dominicana a EE.UU. representa un delicado equilibrio entre preservar su herencia y abrazar nuevas experiencias. Este equilibrio, cree, ha sido fundamental en esculpir tanto su música como su identidad. “No siento que interfiera; solo me muestra el valor de la vida”, reflexiona, destacando el profundo enriquecimiento derivado de abrazar los diversos aspectos de su vida.

Mirando hacia el futuro, LowKey M30 habla con emoción de sus próximos proyectos, incluyendo colaboraciones y nueva música. Estas movidas no son meras adiciones a su carrera; son pasos integrales hacia la visión más amplia que tiene para su arte. “Hay un montón de música nueva y video con Young Gatillo. Se vienen videos con I’m, también con Yomel”, comparte, su entusiasmo palpable. También insinúa una colaboración significativa con un artista puertorriqueño, una alianza que promete hacer olas en la industria musical. Estos próximos proyectos son más que lanzamientos; representan nuevos capítulos en la saga en evolución de LowKey M30.

La historia de vida de LowKey M30 es una de búsqueda implacable, marcada por una incansable búsqueda de crecimiento, expresión e impacto. Su viaje, desde los animados ritmos de Santo Domingo hasta los dinámicos ritmos de la escena musical urbana estadounidense, se erige como un testimonio del poder de la resiliencia, la creatividad y la influencia perdurable de las raíces culturales. A medida que continúa forjando su camino en el paisaje en constante cambio de la música, LowKey M30 brilla como una luz guía para los artistas aspirantes. Ejemplifica cómo la pasión, combinada con la perseverancia y la autenticidad, puede romper barreras y forjar un legado que resuena a través de generaciones y culturas.

En LowKey M30, vemos más que un artista; vemos un símbolo de esperanza e inspiración, un recordatorio viviente de que los sueños, independientemente de su origen, son válidos y alcanzables a través de la creencia y el esfuerzo dedicado.

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