‘Los Prejuicios Siguen Causando Estragos en la Sociedad’: UNQ Suma un Posgrado en Cannabis, Regulación y Política de Drogas

“Uno de los objetivos principales del posgrado es la formación de profesionales que estén capacitados para la discusión de los nuevos paradigmas en materia de drogas”, explica Luis Osler, abogado especializado en garantías, a propósito del posgrado en “Cannabis, Regulación y Política de Drogas” que dirige y que será dictado en la Universidad Nacional de Quilmes.

Frente a los avances regulatorios que se están gestando en el mundo con respecto al uso del cannabis, resulta cada vez más necesario capacitar por fuera de los prejuicios y de la desinformación que impuso la prohibición. Según Osler: “Esos prejuicios siguen causando estragos en nuestra sociedad. No sólo en el aspecto más oscuro, que es la criminalización, sino en la negación de los aspectos positivos relativos a la salud, la libertad, las garantías, la producción y la economía”.

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—¿Cuál es la importancia del estudio del cannabis en instancias universitarias?

—A la prohibición y a la persecución penal (que, en los hechos, prácticamente se alimenta solo de usuarios de sustancias), se le suma la consecuente desinformación para sustentarla. Por eso, la inclusión del estudio del cannabis en la universidad, ahora formando parte de la currícula de un diploma de posgrado, significa un gran avance para la legitimación de un debate del que solo se escuchaba una campana: la del derecho penal.

En suma, tal como muestra la experiencia, la inclusión del cannabis en el ámbito académico permite abordar la temática desde perspectivas tan diferentes como necesarias. Y ahí aparecen la producción, la botánica, la salud, la economía, el género y los derechos humanos, entre muchas más.

Entretanto, la creación de una carrera de posgrado de características interdisciplinarias permitirá formar profesionales aptos para discutir las políticas de drogas que ya se están debatiendo en el mundo. Agrega Osler: “Sobre todo, debates que están despojados de los prejuicios heredados del oscurantismo prohibicionista”.

El camino

La relación entre el Centro de Estudios de la Cultura Cannábica (CECCa), que preside Osler, y la universidad del conurbano bonaerense existe desde el 2013, fecha de creación de la ONG. Durante ese año, ambas instituciones realizaron en forma conjunta las primeras jornadas universitarias sobre “Política de Drogas  y Cannabis”.

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Durante 2020, en medio de las II Jornadas Universitarias de noviembre, que tuvo la participación de especialistas, usuarios, activistas y académicos, se anunció públicamente la creación del diploma.

“Desde hace tiempo, CECCa viene generando capacitaciones y difundiendo sobre la temática. A la vez, la UNQ se caracteriza por ser una universidad amplia, moderna, innovadora y líder del debate sobre nuevas tendencias, por lo que la propuesta del diploma fue bienvenida desde el comienzo”.

La experiencia universitaria

En el año 2013, la Universidad de Quilmes convocó a las primeras jornadas universitarias sobre “Políticas de Drogas y Cannabis” y, desde aquel momento, se transformó en la primera universidad en abrir las puertas al tratamiento de la temática cannábica.

“En aquella oportunidad, fueron dos días en los que se abordaron temas tales como política de drogas, regulación, abordajes a usuarios de sustancias, clubes de cultivo, medicinal e industrial, todos temas que, si bien hoy son cotidianos, no lo eran tanto en aquel momento. Entre los panelistas estaban Zaffaroni, Gil Lavedra, Touzé, Sain, Calzada, Bercovich, Sorlino, Peyraube, Bousos, Sigman, Bekinstein, Golombek, Ribeiro, entre muchos otros”, recuerda Osler.

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Y continúa: “Fue tal la importancia del evento que, por ejemplo, en el mes de abril, expusieron en Quilmes los legisladores y funcionarios que, a fin de ese mismo año, promulgaron la regulación en Uruguay. La UNQ siempre fue permeable a este tipo de proyectos novedosos y, de hecho, que yo recuerde, esa fue la primera vez que vi una planta de cannabis expuesta a la vista de todos dentro de una universidad”.

Alumnado y metodología

A la sazón, el posgrado en “Cannabis, Regulación y Política de Drogas” estará dirigido a aquellos profesionales de carreras universitarias de 4 o más años de duración (requisito básico de un posgrado) y estará abierto a profesionales de otros países de la región (previo cumplimiento de ciertos requisitos formales respecto de sus títulos).

Asimismo, teniendo en cuenta la temática, previa aprobación o imposición de ciertas condiciones por parte de la Comisión Académica del Diploma, podrán aceptarse alumnos que demuestren un mérito equivalente.

El posgrado estará compuesto por 200 horas cátedra, se desarrollará en tres trimestres de dos materias por trimestre y comenzará en el mes de septiembre. El dato: la inscripción está abierta hasta el 28 de junio y se dictará vía el canal oficial de YouTube de la Universidad.

“La cursada será de una vez por semana (por seminario) y tendrá clases sincrónicas (en vivo) que posteriormente serán subidas al campus de la universidad. Se requerirá el 70% de asistencia y habrá evaluaciones de cada materia y un trabajo/tesis final”, detalla Osler.

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En tanto, el posgrado se dividirá en 7 seminarios de aproximadamente 30 horas cada uno y tratará los siguientes temas: Histórico y Jurídico, Médico, Políticas Públicas de Drogas, Cannabis 1, Cannabis 2, Investigación y Abordaje de Temas Cannábicos y Taller de Elaboración del Trabajo Final.

Cada seminario estará cargo de dos docentes que, a su vez, podrán tener especialistas invitados en sus bloques. El plantel de docentes está conformado por: Lorena Lampolio y Alejandro Corda; Celeste Romero y Marcelo Morante; Victoria Baca Paunero y Diego Silva Forné; Florencia Corbelle y Martín Stawski; Marcelo Rubinstein y Daniel Sorlino; Sol Prieto y Marcos Cané; y Lucía Romero y Jorge Flores.

La comisión académica está integrada por Lorena Lampolio, Victoria Baca Paunero, Federico Gobato y Martín Stawski. Y, lo dicho, la dirección bajo el mando de Luis Osler.