EXCLUSIVA – Directora del Banco de Desarrollo Argentino Explica Cómo y Por Qué el Cannabis es una Apuesta al Arraigo

Cuando pensamos en un banco o en finanzas, en general pensamos en especulación, fuga, bonos e instrumentos poco conocidos, más no en lo productivo. Es decir, en la transformación de materia en bienes reales, tangibles para la economía de carne y hueso.

Sorprende entonces enterarnos de que las finanzas pueden estar también al servicio de la producción y de la industria nacional. En palabras de María de los Ángeles Sacnun, directora del Banco de Inversión y Comercio Exterior de la República Argentina (BICE), el objetivo del mismo es que “la banca pública aspire a ser un motor de desarrollo”. 

Y si de desarrollo se trata, el cannabis legal argentino tiene un rol central. En una entrevista exclusiva, Sacnun explicó por qué el cannabis representa una oportunidad para el arraigo y el desarrollo de las economías regionales con igualdad de género.

Más interesante aún, explicó cómo el Banco pone a disposición fondos para la modernización y la creación de empresas del sector que generan empleo y agregan valor a la producción nacional.

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“El BICE propende a apalancar proyectos productivos que generen empleo y condiciones de mayor igualdad de género. Al momento de otorgar un crédito evaluamos la posibilidad de acceder a financiamiento y el impacto de los proyectos en las economías regionales”, explicó Sacnun, abogada y ex senadora por la Provincia de Santa Fe.

Asimismo, explicó que el banco de desarrollo ofrece créditos blandos, leasings para la compra de equipamiento de trabajo, mediante distintas “líneas de inversión” que promueven la eficiencia energética, exportaciones e importaciones, la ampliación de la producción y el aumento de la competitividad de las PyMEs.

Cannabis: Industria Nacional

Históricamente, cuando la Argentina se desarrolla y crece, las empresas necesitan de insumos importados. Ya que no todos los insumos son 100% fabricados en pesos, muchas empresas necesitan USD que la Argentina no emite para financiar esas importaciones.

Pero, ¿qué tal si sustituimos esas importaciones? ¿Puede el cannabis ser 100% hecho en Argentina y en pesos?

“Cuando la Argentina crece se da una restricción de financiamiento, una restricción externa. Por eso tenemos que administrar cuidadosamente el uso de esos USD que necesitamos para financiar nuestras industrias. Durante el gobierno de Cambiemos, por ejemplo, se dio un proceso de fuga de divisas. Prácticamente el 100% del endeudamiento en USD no fue invertido en la Argentina, se utilizaron para obtener beneficios financieros y se fugaron. No fueron a la fabricación de bienes con mayor integración de capital nacional”, explicó Sacnun.

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“Al ser una industria nueva, el cannabis, puede empezar a fabricar sus insumos en el país. Por eso acompañamos a quienes quieran investigar y desarrollar productos y soluciones para el cannabis medicinal y el cáñamo industrial argentino. Queremos crear más empleos formales, calificados, con salarios competitivos para agregar valor en nuestras economías regionales”, agregó la santafesina.

Sacnun trabajó en las leyes de cannabis de Argentina y reconoce el conocimiento local de pacientes y cultivadores de cannabis. “Es conocimiento adquirido en la lucha por el acceso a la salud”, dijo Sacnun y explicó que el cannabis como política pública requiere continuidad, que se convierta en una economía de desarrollo y una fuente de arraigo en las localidades del interior del país.

“Si queremos un país federal, tenemos que garantizar el arraigo”, sentenció la directora.

Arraigo y desarrollo federal en Argentina

“El arraigo es la oportunidad que uno debe tener de elegir en donde vivir colectivamente. Y estoy convencida que el cannabis medicinal y que el cáñamo industrial pueden convertirse en una gran oportunidad de arraigo para el interior del país”, continuó Sacnun.

En febrero, el BICE, el INASE, y el INTA, se dieron cita en la localidad santafesina de Venado Tuerto, reconocido cluster semillero de la Argentina. Sacnun explicó que allí se suscribió un convenio con una empresa propiedad de jóvenes dedicados a la investigación y el desarrollo del cannabis medicinal.

Si bien Sacnun entiende que el cannabis puede servir a la diversificación productiva, también reconoce que se debe modificar la ley de alquileres y la ley de semillas, para poner en crisis la concentración de la tierra, uno de los problemas estructurales que tiene la República Argentina.

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Asimismo, explicó que este proceso requiere de una intervención del Estado que proteja a los pequeños y medianos productores “que cada día son menos”.

“En el sur de Santa Fe lo vivimos. Somos descendientes del Grito de Alcorta, un movimiento popular que en 1912 se alzó ante el precio de los alquileres. Cuando se puso el Banco de la Nación Argentina al servicio de estos arrendatarios para que pudieran adquirir la tierra que trabajaban, nacieron las características chacras del sur de la provincia de Santa Fe”, detalló Sacnun y destacó que el cáñamo industrial puede ser un cultivo que reactive la economía del “norte cañero” de la provincia.

Cannabis argentino y economía del cuidado: una industria con equidad de género es posible

Muchas de las personas que cultivan cannabis lo hacen para cuidar a otros. Y en su mayoría, las personas que cuidan son mujeres que no reciben un salario por su trabajo.

Es decir, cuidan a otros, pero lo hacen gratis. Entonces, ¿puede ser el cannabis una alternativa para la economía del cuidado?

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“Creo que el cannabis es una gran oportunidad también para las mujeres. Nos hemos hecho cargo históricamente de todas las tareas de cuidado, no solamente de los niños, de las niñas, sino también de los adultos mayores, de los enfermos, de familias enteras. Muchas mujeres no han podido salir al mercado laboral porque han tenido que ocuparse de esas tareas”, adelantó Sacnun.

Y concluyó: “Yo entiendo que el cannabis medicinal también le da una enorme oportunidad a las personas que cuidan. Podemos recoger esa expertise que se ha generado y también capacitar a otras personas que cuidan, en conjunto con el Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social se pueden conformar cooperativas de cuidadoras”.

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