Del Esperma de Maradona al 'Dibu' Martínez Bailando: Conocé a Milonga Customs, Jugueteros Bizarros
Imaginen lo que debe ser tener a Emiliano “Dibu” Martínez enfrente: lo odiás porque es todo lo que querés. Un arquero que se impone, psicopatea y, en las difíciles, se ensancha. Ataja penales, ataja todo. Su energía maradoneana –no existe, hoy, alguien con tanta autoconfianza en el universo- contagia. Los nenes lo aman, los grandes lo amamos.
“Hice al Dibu porque fue la figura destacada del partido y porque está ‘re loco’”. Las dos condiciones que señala Ieie Milonga Herrera, su autor, para justificar la existencia de este muñeco bailarín son bien nítidas: fue el MVP del durísimo partido entre Argentina y Ecuador por la Copa América 2024 (en el que la celeste y blanca pasó por penales después de un partido ajustadísimo) y, en efecto, está loco.
Pero loco bien.
Por caso, los Milonga Customs, referentes de los art toys nacionales, ya se despacharon con varios juguetes de la Selección, como cuando hicieron a Messi y su “Andá pa’ allá, bobo”, al Dibu con la Copa del Mundo o a Julián Álvarez como The Amazing Spider-Man. “Le mandamos bastante”, tira Ieie.
Los muñequitos le ganan a los noticieros
Lo que hace la crew de toy makers Milonga es, digamos, art toy urgente. Si hay una noticia rutilante, ahí están ellos para plasmarla: “Como criterio usamos mucho lo que llama la atención, la noticia. A mí me gustaría dar las noticias con muñecos, ¿viste?”, cuenta el alquimista.
Si bien ellos le dicen “muñequitos”, lo que hacen es una especie de experimento veloz que se nutre de la información cotidiana como su principal sustrato. “Hacemos muñequitos de lo que venga, lo bizarro es nuestra especialidad”, apura Ieie.
Y en su catálogo, figuras rarísimas como la de El Padre Ausente (“Que prácticamente no es nada”), el Brazo de Scioli, el Esperma de Maradona (“Que llegó hasta Alemania y vinieron a casa a hacerme una nota por ese muñeco”). Sí, Milonga Customs le esquiva a la convención puritana, a lo modosito, a buscar agradar. Hacen juguetes viscerales, tóxicos, incómodos: su arte es profundamente honesto y chistoso.
El Dibu bailando: industria bizarra (y Argentina)
“¿Quiénes somos los Milonga? Bueno, somos… somos personas normales. Somos coleccionistas, frikis, nos gustan estas cosas. ¿Cómo nos definimos? Como industria bizarra”, trata de encuadrar Ieie.
Los precios de sus juguetes oscilan entre los $7.000 y $10.000 pesos argentinos (u$s 5 dólares y u$s 7 dólares aproximadamente). “El Dibu que baila es más complejo de hacer, por eso cuesta más caro”, comparte.
“La recepción del muñeco del Dibu fue buena. Venimos un poco flojos con las actualidades y publicar cosas pero se remontó con el Dibu y otros más que hicimos hace unos días”.
Delivery de juguetes
La figura exprés del Dibu se consigue en dos modelos: uno está tirado atajando, bajo el punchline para nada exagerado de “El mejor arquero del mundo”; y otro bailando, su maña más popular. El dato que corre sobre el mismo riel: la cadena de hamburguesas Mostaza también sacó dos modelos del arquero de la Selección Argentina (el “verde” del Mundial 2022 y el “rojo” de la Copa América 2024).
“El que está atajando, cuando terminó el partido, ya lo tenía casi terminado. El otro, el que está bailando, lo publiqué al otro día”. Aunque artesanal y underground, el ritmo de trabajo de Milonga Customs es realmente veloz. A ellos también, un poco, les cabe el “están re locos”.
Pero locos bien.
“Sacar un modelo nuevo depende mucho de cada muñeco. A veces tengo bases de otros muñecos, me inspiro y los modifico. Como el del Dibu atajando, que era un arquero común y le hice unas modificaciones, lo pinté de otros colores y ya está. Así que es muy relativo: a veces lo puedo sacar al toque, a veces tardo uno o dos días”. Si uno o dos días es “un montón”, ¿cuánto es “al toque”?
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