Semáforo Electoral en Brasil: ¿Cómo Serían las Distintas Políticas de Drogas de lxs Candidatos?

¿Cómo planean lxs candidatos presidenciales de Brasil la política de drogas de su gobierno? ¿Qué propuestas antiprohibicionistas están brotando en cada estado? La guía Candidatos 420, Smoke Buddies explica la posición de lxs candidatos a la presidencia de la República de Brasil en materia de drogas. Asimismo, enumera lxs candidatos a los puestos del gobierno estatal, del Senado y de la Cámara de Diputados, tanto federal como estatal, que apoyan, aunque sea parcialmente, la causa.

Poco comentada durante los periodos de campaña y los debates electorales, la visión sobre la política de drogas de lxs candidatos a los cargos ejecutivos y legislativos en las elecciones de 2022 de Brasil determina no sólo el futuro de la legalización del cannabis en el país, sino otras cuestiones estratégicas como la salud, la economía y la seguridad pública, todos temas prioritarios para lxs brasileños.

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Por ello, y con el fin de informar a nuestrxs (e)lectores sobre los lineamientos propuestos en estas elecciones, Smoke Buddies preparó la guía de Candidatos 420, que recoge la posición y el plan de gobierno de cada candidato a la presidencia de Brasil sobre el tema. Asimismo, enumera, estado por estado, a lxs candidatos a cargos estatales y legislativos que, en alguna medida, se han posicionado a favor o han apoyado proyectos de ley, aunque sea en el ámbito medicinal.

Comprueba, a continuación, la posición de lxs candidatos a la Presidencia de la República de Brasil (en orden alfabético) y sus planes de gobierno sobre la política de drogas:

Ciro Gomes (PDT)

El plan de gobierno de Ciro Gomes (PDT) establece que: “Hay que rediseñar la política de drogas, partiendo de un enfoque intersectorial de reducción de daños y daños que se articule con la justicia, la salud y la asistencia social. Hay que mejorar la gestión de las prisiones para aumentar el porcentaje de la población penitenciaria que se resocializa”.

El candidato también se pronunció a favor de las comunidades terapéuticas como la mejor forma de tratar a las personas “adictas”. En GloboNews, dijo que tenía un proyecto para mejorar la relación entre el Estado y las religiones; y añadió: “Por ejemplo, tengo mucha experiencia, fui Secretario de Salud de Ceará, y nadie sabe tratar mejor a las personas con adicciones, que voluntariamente quieren dejar las drogas, que las comunidades terapéuticas”. Esto contradice su declaración anterior de que el Estado debe proteger la tolerancia religiosa, ya que las comunidades terapéuticas promueven la imposición de la fe cristiana al exigir a lxs pacientes que adopten una rutina religiosa.

Eymael (DC)

Para Eymael, la cuestión de las drogas es una política de seguridad pública. Su plan de gobierno aboga por “fomentar la interacción del Gobierno Federal con los gobiernos estatales y municipales y la integración de todas las fuerzas de seguridad, incluida la participación de las fuerzas armadas, en la protección de las fronteras contra el tráfico de drogas y armas”.

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El documento también propone: “Interacción del Gobierno Federal con las políticas públicas estatales y municipales para combatir las drogas y recuperar a sus adictos”.

Jair Bolsonaro (PL)

Bolsonaro (PL) mostró en el primer semestre de su gobierno que su política de drogas se basaría en la abstinencia, la internación involuntaria, las comunidades terapéuticas, el negacionismo y la comunicación retrógrada. Pero se mostró cada vez más insensible sobre la agenda al atacar públicamente el PL 399/2015, que regula el cannabis para uso medicinal e industrial en el país. De hecho, calificó el proyecto de “basura” e indicó que lo vetaría, en caso de que la agenda llegue a sanción presidencial. Otro tema estancado es la despenalización del consumo, cuyo juicio no avanza en el STF para evitar conflictos con el presidente.

En cuanto al tema de las drogas, asociado a la cuestión de la seguridad pública, el plan de gobierno de Bolsonaro dice: “Fruto de acciones eficientes e integradas en el área de la seguridad pública, con un aumento del 185% en el número de operaciones policiales realizadas en relación al 2018, Brasil registró en el 2021 una caída del 6,5% en el número de homicidios en comparación con el año anterior, siendo la tasa más baja desde el 2011, cuando se inició la serie histórica. La letalidad policial tuvo una reducción del 4,2% respecto al 2020. También se produjo la incautación de 16.026 armas de fuego ilegales, lo que supone un aumento de cerca del 150% en comparación con 2018. Cabe destacar el aumento significativo (en comparación con 2018) del número de incautaciones de drogas (cocaína 131% y marihuana 172%), vehículos (134%) y detención de delincuentes (470%)”.

Luiz Inácio Lula da Silva (PT)

El plan de gobierno de Lula (PT) contempla la reforma de la política de drogas, centrada en la reducción de daños, y la sustitución del modelo militar de combate al narcotráfico. Sin embargo, cabe recordar que fue el ex presidente quien sancionó la actual ley de drogas, en el 2006. Sus consecuencias, más de quince años después, se consideran desastrosas para los sistemas de salud pública, seguridad y justicia, además de las esferas de la ciencia y la sociedad civil.

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“El país necesita una nueva política de drogas, intersectorial y centrada en la reducción de riesgos, la prevención, el tratamiento y la asistencia al usuario“, dice el documento que recoge las directrices de la campaña. “El actual modelo bélico de lucha contra el tráfico será sustituido por estrategias de enfrentamiento y desarticulación de las organizaciones criminales, basadas en el conocimiento y la información, con el fortalecimiento de la investigación y la inteligencia”.

También hay que tener en cuenta la visión de su vicepresidente, Geraldo Alckmin (PSDB). Su mandato como gobernador de São Paulo estuvo marcado por los casos de brutalidad y el aumento de la letalidad policial.

Pablo Marçal (PROS)

El candidato del PROS, Pablo Marçal, propone: “Intensificar el programa de seguridad en puertos y aeropuertos para frenar actividades delictivas como el tráfico de armas y municiones, drogas, piedras preciosas, animales salvajes, personas y órganos, entre otros”.

Además, su plan de gobierno incluye: “Promover programas nacionales de emancipación de las drogas en colaboración con la sociedad civil”.

Simone Tebet (MDB)

La líder de la Bancada de Mujeres en el Senado y aspirante por primera vez a la presidencia Simone Tebet (MDB) defiende la asistencia a las personas con adicción y el fortalecimiento de los servicios de “unidades terapéuticas y de rehabilitación en los hospitales de la red del SUS”. Además, ya se ha posicionado públicamente en contra de la legalización de la marihuana en el país.

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Su plan de gobierno enumera los siguientes puntos relativos a la política de drogas, desde la perspectiva de la seguridad pública: “Recuperar el prestigio de la diplomacia brasileña en los diversos foros internacionales, intensificando la participación del país en los trabajos de las Naciones Unidas, especialmente en los destinados a (1) mitigar el cambio climático; (2) promover el desarrollo sostenible; (3) garantizar la paz y la seguridad internacionales; (4) combatir el tráfico de armas y drogas, la corrupción, el terrorismo y la ciberguerra, entre otros problemas mundiales; y (5) reformar la Carta de la ONU y ampliar su Consejo de Seguridad”. También dice: “Vigilar las fronteras y controlar con rigor y mayor eficacia la entrada de armas y drogas en el país, ampliando y completando la implantación de sistemas de vigilancia y control, como el Sisfron”.

Un punto a tener en cuenta es que la candidata a vicepresidenta de la candidatura de Tebet es la senadora Mara Gabrilli (PSDB), paciente de cannabis con fines terapéuticos y defensora de ampliar el acceso al cannabis medicinal en Brasil.

Sofía Manzano (PCB)

La candidata del Partido Comunista Brasileño (PCB), Sofía Manzano, defiende en su programa de gobierno importantes directrices en el debate sobre la reforma de la política de drogas.

“El fin de la política de ‘guerra contra las drogas’. Despenalización del consumo de drogas, con la legalización de la marihuana a corto plazo. La desmilitarización completa de la seguridad pública, con la unificación de las fuerzas policiales y la institución de un ciclo policial completo junto con la desconexión de las fuerzas de seguridad del ejército, bajo bases curriculares y de formación completamente reestructuradas en una lógica democrática, contribuyendo efectivamente al fin del genocidio de la población negra”, dice el plan.

El documento, titulado Un programa anticapitalista y antiimperialista para Brasil, propone la despenalización del consumo de drogas, así como la legalización de la marihuana a “corto plazo”, como propuesta de seguridad pública. Asimismo, pide la “legalización de las drogas y el fin de la guerra contra lxs pobres”, en un tema que trata de la desmilitarización de la sociedad. “Se implementará la reformulación de la concepción y estructura del sistema penitenciario, con la revisión de la política de encarcelamiento por pequeños delitos, la creación de sistemas penitenciarios centrados en el trabajo y la educación. Legalización de las drogas y fin de la guerra contra lxs pobres”.

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“En la sociedad de clases dependiente, la policía se ha constituido en máquinas de matar jóvenes y población pobre de la periferia, especialmente a lxs negros, capas sociales que están atrapadas entre la brutalidad de la policía y las milicias y el poder de los “soldados de a pie” del narcotráfico en las favelas y periferias (cuyos principales financiadores, sin embargo, no viven en las favelas, sino en los barrios nobles de Brasil y del extranjero)”.

Soraya Thronicke (União)

La candidata de União es escueta al proponer en su plan de gobierno: “Establecer programas, en colaboración con los ministerios, las escuelas, las organizaciones sociales y familiares, para la educación y la lucha contra el tabaco, el alcohol y la drogadicción”.

Además, Soraya Thronicke pretende “implementar una política nacional antidroga, a través de acciones multidisciplinarias del gobierno brasileño, socios internacionales y municipios”.

Vera (PSTU)

Entre los candidatos a la presidencia de Brasil, Vera (PSTU) es uno de las únicas que propone una reforma de la ley de drogas que incluya la despenalización de las mismas y la desmilitarización de la policía como estrategias para combatir la violencia urbana.

“La violencia urbana es un problema muy grave, sobre todo en los barrios pobres de las grandes ciudades. Lxs pobres sufren una triple amenaza: las bandas de narcotraficantes, las milicias y la policía. El narcotráfico genera una burguesía lumpen que mueve miles de millones, corrompe a la policía, recluta jóvenes y controla regiones enteras. La policía corrupta y violenta invade los barrios, asesina a lxs jóvenes negros y nunca, jamás, acaba con el tráfico de drogas. Las milicias sustituyen a las bandas de narcotraficantes por otras bandas, con policías y ex policías convertidos en bandidos. Quienes sufren las consecuencias de esta realidad son lxs pobres, en particular lxs jóvenes. Los asesinatos de jóvenes negrxs son la mayor causa de muerte en este grupo etario”, dice el documento titulado ¡Un programa socialista para Brasil!

Sobre la despenalización de las drogas, el plan dice: “Está demostrado que su ilegalidad no reduce su consumo. El ejemplo de la ley seca en Estados Unidos es categórico: la prohibición de la venta de alcohol no acabó ni redujo su consumo, sólo fortaleció a las bandas. El consumo de drogas debe considerarse un problema de salud pública, no un problema de represión policial. La despenalización acabará con el comercio ilegal, las bandas multimillonarias y la corrupción policial de estas bandas“.

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“Además, abogamos por la desmilitarización y el fin de la actual policía, irreformable, violenta y corrupta. Abogamos por la creación de otro cuerpo de policía, con sus mandos elegidos por la población. Esto podría favorecer un control de la población sobre la policía”.

Otros candidatos

Los candidatos Felipe D’Avila (Novo) (cuyo vicepresidente es Tiago Mitraud, diputado que votó a favor del proyecto de ley PL 399/2015), Léo Péricles (UP) y Roberto Jefferson (PTB) (que ya declaró que quiere la creación de una superintendencia de la PF para combatir las plantaciones de marihuana en la selva amazónica), no mencionan la política de drogas en sus planes de gobierno si llegan a la presidencia de Brasil.

Estado por Estado

A continuación, la lista de candidatos (por estado, cargo y orden alfabético) que se han posicionado públicamente a favor, han creado o han votado a favor de la aprobación de proyectos de ley sobre cannabis, aunque sea medicinal.

Alagoas

Representante del Estado

Angela Garrote (PP) – 11.111

Flávia Cavalcante (MDB) – 15.555

Lobão (MDB) – 15.800

Bahia

Representante Federal

Alice Portugal (PCdoB) – 6522

Bacelar (PV) – 4343

Ceará

Representante Federal

Elayne Carvalho (PDT) – 1269

Distrito Federal

Gobernador

Leandro Grass (PV) – 43

Representante Federal

Louise Verde (PV) – 4321

Representante del Distrito

Gaby Santos (PDT) – 12.321

Goiás

Representante Federal

Yuri Tejota (Podemos) – 1944

Representante Federal

Fabrício Rosa (PT) – 13.200

Mato Grosso

Representante del Estado

Lúdio Cabral (PT) – 13.130

Wilson Santos (PSD) – 55.100

Mato Grosso do Sul

Representante Federal

Fábio Trad (PSD) – 5555

Minas Gerais

Representante Federal

Dário de Moura (PSOL) – 5042

Eduardo Barbosa (PSDB) – 4535

Representante del Estado

Dona Tereza (PT) – 13.033

Felipe Gomes (PDT) – 12.412

Pará

Representante del Estado

Eduardo Costa (PTB) – 5555

Paraíba

Representante Federal

Rafafá (PRP) – 4424

Paraná

Representante Federal

Luciano Ducci (PSB) – 4040

Representante del Estado

Ana Júlia Ribeiro (PT) – 13.213

Goura Nataraj (PDT) – 12.108

Pernambuco

Representante del Estado

Ivan Moraes (PSOL) – 50.100

Marco Smoke (Avante) – 70.420

Waldemar Borges (PSB) – 40.640

Piauí

Representante del Estado

Ziza Carvalho (MDB) – 15.999

Rio de Janeiro

Representante Federal

André Barros (PSOL) – 5042

Chico D´Angelo (PDT) – 1210

Talíria Petrone (PSOL) – 5077

Orlando Zaccone (PDT) – 1201

Representante del Estado

Carlos Minc (PSB) – 40.000

Serginho Monteiro (PSOL) – 50.420

Vinicius Rodrigues (PCO) – 29.292

Rio Grande do Norte

Senador

Rafael Motta (PSB) – 400

Representante Federal

Natália Bonavides (PT) – 1311

Representante del Estado

Isolda Dantas (PT) – 13.123

Santa Catarina

Representante del Estado

Marcos Vinícius Sodré (PDT) – 12.420

Zelize (PSOl) – 50.420

Sergipe

Gobernador

Fábio Mitidieri (PSD) – 55

Representante Federal

Eder Matos (MDB) – 1520

Representante del Estado

Maria Mendonça (PDT) – 12.222

São Paulo

Representante Federal

Alex Manente (Cidadania) – 2323

Alexandre Padilha (PT) – 1354

Claudio Gaspar (Rede Sustentabilidade) – 1819

Fabio Defourny Martins (PSB) – 4070

Guilherme Boulos (PSOL) – 5010

Isa Penna (PCdoB) – 6500

Ivan Valente (PSOL) – 5050

Kim Kataguiri (União Brasil) – 4433

Luiza Erundina (PSOL) – 5021

Maisa Diniz (Rede Sustentabilidade) – 1888

Paulo Teixeira (PT) – 1398

Raul Thame (PV) – 4342

Sâmia Bomfim (PSOL) – 5000

Santo Legaliza (PSOL) – 5042

Sonia Guajajara (PSOL) – 5088

Tetê Oliveira (PSOL) – 5014

Representante del Estado

Bancada Feminista (PSOL) – 50.000

Caio França (PSB) – 40.640

Ganja Coletiva (PSOL) – 50.420

Marina Helou (Rede Sustentabilidade) – 18.000

Paolla Miguel (PT) – 13.199

Patrícia Bezerra (PSDB) – 45.180

Pretas (PSOL) – 50.900

Sérgio Victor (Novo) – 30.500

Vía Smoke Buddies, traducida por El Planteo.

Foto por Rafaela BIazi vía Unsplash