Princesa de Malasia Lucha por Liberar a Dr. Ganja, Condenado a Muerte por Usar Cannabis Medicinal

La vida a veces realmente supera la ficción. Ésta es una de esas veces. Imagínate: primero, te da cáncer. Luego, te vuelves lo suficientemente fuerte como para luchar contra él y sobrevivir. Después de todo eso, decides ser noble y humano y compartir los conocimientos médicos que adquiriste mientras luchabas contra tus problemas de salud. ¿El resultado? Te enfrentas a una sentencia de muerte… no por el cáncer, sino por un pelotón de fusilamiento.

Ésta es la historia de Amiruddin Nadarajan Abdullah, de 62 años, más conocido como Dr. Ganja o Dr.G.

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Después de que le diagnosticaran un doloroso tumor en la médula espinal que le hizo perder un riñón, el Dr. Ganja, que luchaba contra el dolor crónico y la fatiga relacionada con la quimioterapia, decidió buscar tratamientos alternativos. Así llegó  finalmente al cannabis medicinal, en forma de aceite de semillas de cáñamo. Le funcionó de maravillas hasta que fue detenido y acusado de distribuir chocolates y brownies hechos con aceite de semillas de cáñamo. El Dr. Ganja no es médico, en realidad. Se ganó ese apodo por su costumbre de invitar a su casa a personas que padecían cáncer y otras dolencias y compartir con ellas su medicina de aceite de cáñamo.

A pesar de la decisión de las Naciones Unidas del año pasado de reconocer las propiedades medicinales del cannabis, muchos defensores esperaban que los países de todo el mundo se pusieran al día con la evolución de las actitudes hacia la planta. Algunos lo hicieron. Malasia no fue uno de ellos. Este país del sudeste asiático sigue teniendo las leyes más duras del mundo en materia de cannabis, incluida la pena de muerte para narcotraficantes.

El Dr. G, que sirvió en el ejército malayo durante 22 años, fue detenido en el 2017 y acusado de 36 delitos según la Ley de Drogas Peligrosas de Malasia.

“No es un narcotraficante ni un Señor de la droga”, dijo su hija Siti a VICE World News.

La princesa de Malasia y el Last Prisoner Project se unen para ayudar al Doctor Ganja

La princesa malaya Tengku Chanela Jamidah colabora con el Last Prisoner Project (LPP) para apoyar la apelación del Dr. Ganja, informó Forbes. Han lanzado un evento en conjunto con el fin de recaudar fondos para su causa.

La recaudación de fondos es el primer proyecto sobre cannabis internacional del LPP, pero están muy comprometidos.

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“Last Prisoner Project tiene la visión de liberar hasta el último preso por cannabis en todo el mundo”, dijo Mary Bailey, directora general de LPP. Esta organización sin fines de lucro se dedica a la reforma de la justicia penal.

La princesa Jamidah dijo que Malasia debería permitir el cannabis como un derecho humano inherente. Como figura conocida en los sectores de la moda, la belleza y el entretenimiento, ha utilizado su amplia plataforma durante los dos últimos años para promover la legalización del cannabis. También es la patrocinadora oficial del grupo malayo de defensa del cannabis MASA.

‘No pararé hasta que sea libre’

En una entrevista con Forbes, la Princesa explicó que hay que recordar a los malayos que el cannabis y el cáñamo han sido utilizados por sus antepasados durante cientos de años.

“Soy consciente de que hay muchos dentro y fuera de la familia que se oponen a lo que hago. Esto no es lo que temo. Temo vivir una vida que no sea en honor a mi autenticidad y mi verdad, creo que la planta es extremadamente inteligente y es nuestra maestra; y prefiero vivir mi vida en reconocimiento de esa verdad que vivir una vida privada del camino y la misión de mi alma”, dijo Jamidah.

La princesa hizo hincapié en el panorama general y en los muchos pacientes que necesitan la marihuana medicinal.

“Debemos tener en cuenta al niño epiléptico, al enfermo de cáncer, al de Alzheimer y al de Párkinson que se enfrentan al dolor, al sufrimiento y arriesgan sus vidas cada día privados de esta medicina que ha demostrado ser una cura. ¿Qué riesgos corro yo en comparación con su valor y su supervivencia?”.

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La princesa se muestra tan firme en la liberación del Dr. G como en la de la planta de cannabis.

“Que mi voz y mi activismo sean un recipiente para el Dr. G, ya que creemos en las mismas verdades. No pararé hasta que sea libre”, dijo la princesa.

Quienes lo deseen pueden contribuir a la campaña de Crowdfunding del Dr. G. Todo lo que se recaude se utilizará para apoyar la apelación de su sentencia de muerte y, con suerte, su liberación.

Vía Benzinga, traducido por El Planteo.

Foto por Pixabay vía Pexels

Fecha de publicación original: 17 de junio de 2021