¿Qué Pasa con el Delta-8-THC, el Polémico Cannabinoide Legal? Una Perspectiva Científica y Jurídica

El entorno legal que rodea al cannabis y al cáñamo en Estados Unidos, Canadá y muchos otros países del mundo está cambiando rápidamente. La planta ya no lleva el estigma del siglo XX. En la última década, se ha aceptado comúnmente que los cannabinoides, los flavonoides y los terpenos del cannabis pueden afectar positivamente al bienestar.

No obstante, no se han tenido muy en cuenta los resultados fenotípicos y sociológicos potencialmente adversos. La existencia del sistema endocannabinoide y los receptores CB1 y CB2, por ejemplo, aboga por una mayor investigación y comprensión de los fitocannabinoides y su papel en la fisiología.

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En EEUU, el panorama legal que rodea al cannabis es un mosaico de gruesos límites entre los estados y el gobierno federal. Desde el punto de vista de la DEA, la planta de cannabis o los productos cannabinoides son ilegales si contienen más de un 0,3% de THC (delta-9-tetrahidrocannabinol).

En un artículo de smithsonianmag.com, Brian Handwerk escribe que la marihuana hoy suele contener entre un 18% y un 30% de THC. Los niveles de THC tan altos son exponencialmente más potente que la marihuana de los ’80.

El cáñamo se define en el Registro Federal de los Estados Unidos como cualquier parte o derivado (incluidas las semillas) de la planta Cannabis sativa L. con una concentración en peso seco de tetrahidrocannabinoles no superior al 0,3%.

En este contexto, los tetrahidrocannabinoles incluyen las sales y los isómeros del THC. La FDA debe garantizar que los alimentos, los medicamentos y los suplementos dietéticos sintetizados o derivados del cannabis o del cáñamo cumplan con la normativa de la DEA.

El USDA debe regular la producción de cáñamo industrial. En marzo de 2021, emitió una norma final que obligaba a “mantener registros sobre las tierras en las que se produce el cáñamo, analizar los niveles de THC total, eliminar las plantas que no cumplan la normativa, conceder licencias a los productores de cáñamo y garantizar el cumplimiento del nuevo programa”.

En los estados que han legalizado el uso medicinal o adulto de los productos del cannabis, la legislación está definida para las pruebas de los productos. Los pesticidas y disolventes residuales, los terpenos, las micotoxinas, los metales pesados y el cribado microbiano de E. coli y Aspergillus spp. son las pruebas requeridas habitualmente.

En cuanto a los cannabinoides, los estados exigen una evaluación cuantitativa del THC total y del cannabidiol (CBD) total. El CBD es un fitocannabinoide común derivado de la descarboxilación del ácido cannabidiólico.

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Estas métricas son una suma normalizada del ácido correspondiente más el compuesto neutro. El THC y CBD totales se determinan mediante las ecuaciones 1 y 2.

Ecuación 1: THC total = 0,877 * [Ácido tetrahidrocannabinólico] + [THC]

Ecuación 2: CBD total = 0,877 * [Ácido cannabidiólico] + [CBD]

Recientemente, el delta-8-THC se ha convertido en el controvertido pariente del THC.

En los productos más procesados químicamente, el potencial sintético de los subproductos del THC es alto, y a menudo se forman compuestos como el delta-8-THC. Y aunque no está definido en la mayoría de las normativas, la determinación cuantitativa de delta-8-THC es fundamental para la precisión del THC total.

¿Qué es el delta-8-THC y cómo se produce?

Mucha gente no sabe que las plantas de cannabis no sintetizan genéticamente el THC. De hecho, el genoma del cannabis está codificado para sintetizar ocho ácidos fitocannabinoides.

A partir de estos ácidos, se sintetizan no genéticamente hasta 66 a 100 cannabinoides (se afirma que hay cientos de cannabinoides), incluido el THC, mediante procesos como la descarboxilación, la fotoirradiación, la fotooxidación y otros procesos de degradación.

En las plantas cosechadas, el delta-8-THC se forma con el tiempo a través de un proceso que transforma el THC en un “pariente” cercano denominado químicamente isómero. Tiene el mismo número y configuración de átomos que el THC, pero se diferencia por la posición de un doble enlace carbono-carbono. Esta sutil diferencia genera diferentes propiedades bioquímicas y físicas en el delta-8-THC en comparación con el THC.

Aunque la formación de delta-8-THC se produce mediante procesos naturales a lo largo del tiempo, su concentración relativa suele ser baja en comparación con el THC y el CBD en el material vegetal.

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El delta-8-THC también se sintetiza fácilmente a partir del CBD y esto es, junto con el hecho de ser un isómero del THC, el centro de la controversia entre quienes defienden el delta-8-THC, el gobierno y las jurisdicciones regionales.

¿Cuál es su atractivo?

El delta-8-THC se conoce a veces como THC-light. Anecdóticamente, se supone que tiene algunas propiedades psicoactivas, pero puede que no tenga las intensas propiedades embriagadoras del THC. Ciertamente, hay que realizar más investigaciones para evaluar las afirmaciones que no han sido evaluadas en estudios controlados.

El atractivo actual del delta-8-THC es la percepción del estatus legal del compuesto y el hecho de que, de alguna manera, elude la ley federal.

¿Es legal el delta-8-THC?

Técnicamente, no. La DEA considera que el delta-8-THC es una sustancia controlada derivada sintéticamente de la Lista I.

Según Bill Weinberg, del CBD Project, la lista oficial de sustancias controladas menciona el THC y el delta-8-THC en su apartado de tetrahidrocannabinoles.

¿Existe un mercado de consumo?

Desde el 2020, las ventas de productos de delta-8-THC han aumentado exponencialmente.

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Defensores del delta-8-THC afirman que la Ley Agrícola del 2018 se olvidó de declarar explícitamente el estatus legal del delta-8-THC y, por lo tanto, es legal. Sin embargo, muchas jurisdicciones de Estados Unidos y la DEA no están de acuerdo.

¿Cuál es el futuro del delta-8-THC?

En los productos que contienen altas concentraciones de delta-8-THC, el compuesto se sintetiza y no se obtiene mediante procesos naturales posteriores a la cosecha de materiales vegetales.

Dado que la DEA considera ilegal la producción sintética de delta-8-THC y el hecho de que sea un isómero del THC, estos dos puntos arrojan un futuro incierto en los Estados Unidos para los productos de delta-8-THC.

¿Está el delta-8-THC por debajo del THC, o se convertirá en la siguiente novedad en la venta y el consumo de cannabis? Todavía está por ver, pero ten por seguro que el debate será acalorado en el futuro inmediato en los Estados Unidos.

Vía Cannabis & Tech Today, traducido por El Planteo.

Foto por Rob Warner vía Unsplash