Hipocresía en el Parlamento Británico: Cocaína en los Baños y Persecución de Consumidores

Boris Johnson, el Primer Ministro británico, anunció una ofensiva en contra de las bandas narcotraficantes “county lines”.

¿Qué son exactamente los “county lines”? Es un término utilizado para describir las bandas y las redes criminales organizadas que participan en la exportación de drogas ilegales a una o más áreas de importación dentro del Reino Unido. Según la Agencia Nacional del Crimen, es habitual que exploten a niños y adultos vulnerables para trasladar y almacenar las drogas y el dinero. A menudo, usan coacción, intimidación, violencia (incluida la violencia sexual) y las armas.

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Johnson y la ministra del Interior, Priti Patel, presentaron una estrategia de diez años para eliminar los estupefacientes ilegales del Reino Unido.

De esta manera, las medidas propuestas incluyen pruebas de detección de drogas en el momento de la detención, cursos de concientización y sanciones penales para quienes sigan consumiendo. Según reportó Evening Standard, la policía estará autorizada a utilizar los celulares de los traficantes detenidos para enviar mensajes a sus clientes, con el fin de desalentar el consumo y dirigirlos a centros de apoyo.

El problema de esta iniciativa: también se perseguirá a los consumidores

El Gobierno está estudiando retirar el pasaporte de los consumidores de clase media como parte de las medidas de represión. Al ser interrogado sobre este tema, el Primer Ministro declaró: “Estamos estudiando la posibilidad de hacer frente a los llamados ‘consumidores de drogas habituales’ que no creen ser parte del problema. Al final, toda la demanda está ayudando a crear el problema”.

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De acuerdo a Mirror, desde que asumió, el ejecutivo gastó 300 millones de libras esterlinas para hacerle frente a esta situación.

Cocaína en el Parlamento del Reino Unido

A pesar de las políticas represivas que el Gobierno pretende implementar, la policía detectó restos de cocaína en 11 de los 12 baños del Parlamento del Reino Unido. Incluso, en un baño cercano al despacho de Boris Johnson, según informó Business Insider.

Por caso, se utilizaron paños de detección de drogas en lavabos a los que solo pueden acceder los titulares de pases parlamentarios (legisladores, personal y periodistas).

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En un comunicado, Lindsay Hole, portavoz de la Cámara de los Comunes, dijo: “Las informaciones sobre el consumo de drogas en el Parlamento dadas al Sunday Times son profundamente preocupantes, y las plantearé como una prioridad a la Policía Metropolitana esta semana. Espero que se aplique la ley de forma plena y efectiva“.

Foto por Jannes Van den wouwer vía Unsplash