¿Por Qué los Inversores Son Partidarios del Cannabis?

La industria del cannabis es real. Sí, todavía es emergente. Sí, el cannabis sigue siendo ilegal a nivel federal. Pero las cosas han cambiado drásticamente en los 7 años transcurridos desde que lanzamos nuestros primeros fondos de inversión gestionados profesionalmente.

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He aquí algunas razones por las que creemos que el cannabis sigue siendo el sector adecuado para invertir hoy en día.

Crecimiento meteórico

La industria del cannabis duplicará su tamaño en los próximos 5-6 años. Las ventas legales de cannabis en Estados Unidos superaron los USD 17.500 millones en 2020, un 46% más que los USD 12.100 millones de 2019.

Las previsiones predicen que las ventas se duplicarán de nuevo hasta los USD 41.300 millones en 2025 (estimaciones conservadoras para EEUU). Las ventas mundiales de cannabis crecerán hasta los USD 56.000 millones en 2026 desde los USD 21.000 millones actuales.

La demanda supera a la oferta

Un análisis de las empresas de cannabis que cotizan en bolsa en EEUU indica que su capacidad actual sólo cubre el 19% del mercado total. Con una capitalización de mercado actual de unos USD 36.000 millones, los 10 principales operadores multiestatales que cotizan en bolsa sólo sirven a una fracción del valor total del mercado.

Sin embargo, las valoraciones se sitúan por detrás de las de las empresas canadienses que cotizan en bolsa, siendo el mercado estadounidense muchas veces más grande que el de Canadá.

De ilegal a esencial

La base del crecimiento de 2020 fue el hecho de que todos los estados legales reconocieron el cannabis como esencial en medio de la pandemia de COVID-19. Los consumidores acudieron en masa a los dispensarios en previsión de los cierres. De “ilegal a esencial” es como muchos lo describen. Y esta designación refleja lo lejos que ha llegado la industria.

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El 68% de los estadounidenses cree que la marihuana debería ser legalizada, frente al 12% en 1972. Para muchos, el año 2020 fue una llamada de atención a la demanda acumulada de cannabis.

Al diablo con la política

El cannabis ya no es una cuestión partidista, y cada vez menos una cuestión generacional. Sólo el 75% de los estados permite la venta de cannabis legal para uso adulto, y el 39% sigue operando en marcos más restrictivos de sólo uso médico. Aun así, cinco nuevos estados legalizaron el cannabis en las elecciones generales de 2020, y Nueva York y Nuevo México se unirán a la fiesta del uso adulto en 2021. Puede que la pandemia de COVID-19 haya acelerado la adopción del cannabis por parte de los consumidores en 2020, pero los logros de la legalización reflejaron un cambio en la aceptación cultural del cannabis como parte del estilo de vida estadounidense. Incluso los votantes de Mississippi aprobaron la legalización del cannabis en 2020.

Legalización y Ricitos de Oro

A nivel federal, está surgiendo un escenario de “Ricitos de Oro” en torno a la legalización. La inacción federal está apoyando un statu quo al que los inversores y operadores se han acostumbrado. Los estados están liderando el camino demostrando que pueden regular y gravar el cannabis de forma segura. Y los vencedores se llevan el botín.

Los ingresos fiscales procedentes del cannabis alcanzaron los USD 2.800 millones en el año 2020. Estos fondos se están utilizando para reparar escuelas, financiar programas de salud mental y llenar las arcas estatales agotadas por la pandemia de COVID-19. A nivel federal, la reforma bancaria parece prometedora y el Senado se ha comprometido a actuar sobre la legalización federal con o sin el apoyo de la administración Biden.

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Puede que la legalización no conduzca directamente al comercio interestatal y a la reparación de las comunidades, aunque un paso a medias puede desencadenar un nuevo crecimiento y abrirá nuevas oportunidades para los inversores lo suficientemente astutos como para navegar por estos cambios.

Todos los escenarios han sido modelados con operadores multiestatales que tienen claro cómo navegar por las regulaciones dispares de cada estado. Con el respaldo de fuentes de capital institucional más progresistas, los líderes de la industria del cannabis se encuentran en los primeros pasos de una ola de consolidación que podría durar la próxima década… o más.

El cannabis es global

Pero no es sólo Estados Unidos. Canadá legalizó en 2018 y México acordó legalizar el uso medicinal en el 2017. Estados Unidos está en un sándwich de legalización, y solo puede durar un tiempo así. Incluso Europa está avanzando, obligando a la ONU a abordar los tratados globales de lucha contra las drogas, que de repente parecen desfasados. Lo que ha ocurrido en Estados Unidos ocurrirá en todo el mundo. En pocas palabras, el cannabis es uno de los mercados y oportunidades de inversión de más rápido crecimiento en el mundo actual.

El cannabis ofrece a los inversores una oportunidad de riqueza generacional a la par que el auge de Internet, el fin de la prohibición del alcohol y la fiebre del oro de 1849. Los inversores harán bien en asimilar estas tendencias y formular estrategias para invertir en el cannabis que maximicen los beneficios en medio de esta dinámica industrial tan interesante.

El Poseidon Garden Fund se centra en las empresas de cannabis de última generación, que han lanzado negocios atractivos y han ganado una tracción positiva. A medida que estas empresas consideran lo que está por venir (el crecimiento, la expansión y la escala), creemos que van a recurrir al Poseidon Garden Fund, uno de los equipos de capital más experimentados en la industria.

Vía Poseidon, traducido por El Planteo.

Foto por Micheile Henderson vía Unsplash