‘Yo No Tomo Drogas, Hunter Probó de Todo’: Ralph Steadman Habla sobre Hunter S. Thompson y su Nueva Exposición

No es frecuente que los pasillos de un histórico hotel se transformen en un reino de intenso arte, provocación y un vibrante comentario social. Este verano estadounidense, el prestigioso hotel The Red Lion Inn, del pueblo Stockbridge en Massachusetts, combina su elegancia atemporal con los espíritus audaces del ilustrador británico Ralph Steadman y el genio literario Hunter S. Thompson. Su exposición Ride the Thunder, presentada en colaboración con el Norman Rockwell Museum, promete un viaje envolvente (y muy trippy) al alma del arte y la literatura estadounidenses.

Al caminar por las alfombras de felpa del vestíbulo de la segunda planta del Red Lion Inn, se puede sentir el latido del periodismo gonzo de Thompson y Steadman, una forma periodística intrépida, en primera persona y sin complejos. Con 50 piezas originales de sus trabajos en colaboración, como The Kentucky Derby y Fear and Loathing, lxs visitantes se ven arrastrados a un mundo en el que la línea entre observador y participante se difumina con trazos audaces.

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Hablando de su colaboración con Thompson, Ralph Steadman afirma: “Lo improbable de que llegara a ser así [es lo que me encanta]. Era la única persona en todo el mundo a la que necesitaba conocer y juntos vivimos aventuras que se convirtieron en las historias que cubrimos. Nunca sabíamos lo que podía pasar. Era la forma más emocionante y aterradora de existir. Estaba continuamente al borde de la aniquilación y la autodestrucción, pero nunca llegué al límite”.

Las ilustraciones intrépidamente sinceras de Steadman siempre han sido objeto de admiración e intriga. Ahondando en su enfoque único, explica: “Nunca adopté un estilo. Me limité a usar el dibujo desde sus raíces básicas. Es la mejor manera de ser. La gente puede hablar idiomas distintos, pero muéstrales un dibujo animado y ambos podrán entenderlo“.

El auge del periodismo gonzo y su relación con las drogas

Las décadas de 1960 y 1970 no sólo estuvieron marcadas por el auge del periodismo gonzo, sino también por el aumento del uso cultural y recreativo de psicodélicos y cannabis. Hunter S. Thompson, que a menudo hacía alarde de su uso de drogas, personificó la exploración de la época de los estados alterados de conciencia. Sus obras, impregnadas de referencias a estas sustancias, ponían de relieve tanto su potencial para la iluminación como los peligros del exceso.

Ralph Steadman, por su parte, tenía una perspectiva diferente, afirmando inequívocamente: “No tomo drogas de ningún tipo. Hunter probó de todo: esa era nuestra diferencia vital“.

Aunque el propio Steadman se abstuvo del uso de drogas, su arte puede considerarse una manifestación externa de los estados inducidos por las drogas en los que Thompson solía vivir. Sus ilustraciones para obras como Fear and Loathing in Las Vegas están llenas de figuras grotescas y distorsionadas que parecen salir de una neblina alucinógena, representando así visualmente la experimentación de la contracultura con estados alterados de conciencia.

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A pesar de no ser usuario, el arte de Ralph Steadman añade otra capa a la conversación en torno a los psicodélicos y el cannabis, mostrando que unx puede comprometerse con los temas y las ideas provocadas por estas sustancias sin participar en ellas. Por ejemplo, su ilustración de 1971 Mescalito, llamada así por la sustancia psicoactiva mescalina, capta la esencia de una experiencia psicodélica a pesar de la sobriedad del propio Steadman.

El periodismo gonzo, un término explosivo acuñado por William Joseph Cardosa, del Boston Globe, cobró impulso en sus inicios, sacudiendo los cimientos de la narrativa convencional. Steadman añade: “Él [Thomspson] no era sólo un promotor [del periodismo gonzo], ¡era el padre y supongo que yo era el tío un poquito confundido! Era una amenaza constante. Ya nada me parecía común. Así que yo estaba siempre alerta, pero también me habían educado para ser responsable y respetuoso. Con Gonzo cualquier cosa podía ser una historia y había que seguir la corriente, donde sea que ello te llevara”.

Cannabis y contracultura hoy: ¿De qué se trata la exposición en The Red Lion Inn?

Theory Wellness, una empresa de cannabis que figura como colaboradora de la exposición, se inspira en figuras de la contracultura como Steadman y Thompson. Con la reciente oleada de legalización del cannabis y un renovado interés por el potencial terapéutico de los psicodélicos, esta colaboración subraya la importancia de volver a visitar las obras de figuras que en su día desafiaron las normas sociales en torno a estas sustancias. Al destacar su papel en la confrontación de las normas, especialmente en torno a la prohibición del cannabis, Theory Wellness se sitúa en el nexo entre la historia, el arte y la evolución de la sociedad actual.

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La exposición Ride the Thunder encarna este espíritu y ofrece a lxs asistentes algo más que una simple visión estática: es una poderosa evocación de la revolución contracultural de los años 60 y 70. En cierto modo, la exposición también rinde homenaje a una época en la que la psicodelia y el cannabis formaban parte de la contracultura estadounidense y actuaban como catalizadores del cambio social, la innovación artística y la exploración espiritual.

En medio de sus aventuras, Steadman recuerda con cariño un momento especialmente memorable con Thompson: “Hunter estaba remando en la Copa América en Rhode Island. Nos habíamos colado en el agua para pintar con spray uno de los barcos. Hunter me preguntó qué iba a pintar y le respondí: ‘A la mierda con el Papa’. Su respuesta fue: ‘¿Eres religioso, Ralph?’, algo que me pareció muy gracioso. Estaba remando hacia uno de los yates y accidentalmente sacó de uno de los remos de los rollicks y se cayó hacia atrás en el bote, con las piernas en el aire. Entonces nos vieron y soltó una bengala para que pudiéramos ‘huir’. Nunca llegué a vandalizar el barco, algo que probablemente fue bueno, ya que habría terminado en la cárcel y nunca me habrían dejado volver a Estados Unidos”.

En este panorama social, Ralph Steadman reflexiona sobre el papel de la contracultura a la hora de influir en su visión. “Era inusual y más intrigante considerarlo que ser convencional. Nunca encajé del todo en las cosas ‘normales’ que la gente quería que hiciera, [como] conseguir un trabajo, esperar un sueldo cada mes, etc. Yo también estaba fuera y podía ver lo absurdo de todo eso y la doble moral, y eso es lo que parecía revelador, sobre todo al principio, cuando quería cambiar el mundo; y así lo hice, ahora es peor que cuando empecé“, dice.

Quizá lo más íntimo de esta exposición sean los intercambios de faxes entre Steadman y Thompson, que abarcan más de una década y media. Steadman recuerda: “Era tan curioso y un proceso tan anticuado incluso en aquella época. Me parecía bastante banal pero muy inmediato. Así que le seguí la corriente porque a Hunter le encantaba el fax y lo consideraba un método sagrado de comunicación. El fax a su vez era ingenioso y torpe, lo que no deja de ser una especie de genialidad errática. Algunas mañanas nos despertábamos con resmas de papel enroscado en el suelo llenas de los pensamientos de Hunter”. Estos artefactos iluminan las profundidades de la perdurable amistad entre ellos dos, una rara mirada al interior del fervor y la inspiración que hay detrás de sus icónicas colaboraciones.

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Al describir la profunda conexión entre ellos dos, Steadman señala: “Él era como mi opuesto complementario. Yo era el ingeniosamente estúpido y él no sabía dibujar. Éramos como hermanos y, a pesar de nuestras diferencias, creo que compartíamos algunos valores fundamentales. Ambos habíamos hecho el Servicio Nacional, ninguno de los dos encajaba en las expectativas habituales y ambos sentíamos curiosidad por ver qué podía pasar, sin un plan”.

Ride the Thunder: ‘Una olla de hierro con 250 años de historias’

A. Cash, un curador de esta empresa transformadora, considera que el hotel The Red Lion Inn es algo más que un local histórico. Para él, es “una olla de hierro con 250 años de historias, hirviendo a fuego lento con capas de sabores”. Semejante encarnación de la historia resulta un marco apropiado para las impactantes obras de dos figuras que han definido generaciones.

Cabe destacar que este verano estadounidense el hotel celebra su 250 aniversario, lo que eleva aún más su estatura en el mundo del arte, sobre todo cuando se recuerda su inmortalización en el cuadro de Norman Rockwell, Stockbridge Main Street at Christmas. La asociación del hotel The Red Lion Inn con el Museo Norman Rockwell refuerza sus lazos con la historia del arte y la cultura estadounidense.

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Con personalidades como Richard Post (padre del famoso músico Post Malone) y Bobby Kennedy III coproduciendo este gran despliegue, The Red Lion Inn se convierte en algo más que un hotel: se convierte en un santuario del arte.

Una cosa es segura: al salir del hotel tras esta inmersión en el mundo de Thompson y Steadman, los ecos de sus audaces espíritus perdurarán, invitándote a cuestionar, desafiar y, sobre todo, a pensar.

Ride the Thunder estará presentándose del 20 de agosto al 31 de octubre de 2023 en el hotel The Red Lion Inn, situado en 30 Main Street, Stockbridge, Massachusetts, EEUU.

Vía Forbes, traducido por El Planteo

Imágenes cortesía

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