Tango Marihuana

Cannabis

Tango y Marihuana: Andá a Fumarle a Gardel

Tango y Marihuana: Andá a Fumarle a Gardel

✍ 11 December, 2023 - 10:41

La relación entre el tango y la marihuana no termina de concretarse. Si bien el ambiente tanguero se abrió al mundo cannábico entrada la década del 90, la poesía del arrabal no lo refleja en las letras de sus canciones.

El tango, desde sus orígenes, tiene una larga historia con las drogas pero la marihuana nunca fue (ni es) la protagonista.

En 1924, Celedonio Flores escribió la letra de “Milonga fina” que dice: “Te declaraste milonga fina cuando te fuiste con aquel gil, que te engrupía con cocaína y te llevaba al Armenonville”.

En ese mismo año, González Castillo, con Griseta dice: “Y una noche de champán y de cocó, al arrullo funeral de un bandoneón, pobrecita, se durmió…”.

En “Tiempos viejos” (1926), Francisco Canaro y Manuel Romero, señalan en su letra: “Te acordás hermano qué tiempos aquellos. Eran otros hombres, más hombres los nuestros. No se conocían cocó ni morfina…”

Uno de los mayores poetas del género, Enrique Cadícamo, es el autor de “Fanfarrón” (1928) que reza: “Son macanas… que por pura fantasía te dopás con cocaína y que de puro aburrido te paseás en citroén”.

La lista sigue con otros tantos tangos que nombran a la cocaína en lunfardo como merlusa, chabona, frula, camerusa, falopa, merca, etcétera, pero… ¿y la marihuana?

Contenido relacionado: Cocaína: Todo lo que Hay que Saber

Se toma pero no se fuma

Al revisar la poesía tanguera es el alcohol la sustancia psicoactiva que aparece repetidamente. Siempre se habla de que el ambiente del tango es afín al whisky y a la merca.

“Creo que los viejos tangueros tomaban merca para poder seguir escabiando whisky”, dice el músico, productor y compositor Federico Marquestó a El Planteo.

Tango Marihuana

Marquestó junto a Pablo Marchetti fundaron el “Conjunto Falopa” que se enmarcó en la renovación tanguera del siglo XXI hasta su disolución en 2016.

Con composiciones como “Latita” en la que dicen: “Yo paso, no quiero llorar mi fracaso, me llevo la latita del faso porque es mi botiquín” fueron los que empezaron a meter marihuana en sus letras.

“El tango como cultura no habla de la marihuana porque la marihuana es alegre. La poesía tanguera es maldita y la marihuana no”, dice el músico que hoy es el letrista y cantor de “Un bar en Tokyo”.

Con su nuevo proyecto, Marquestó también alude al cannabis en el tango “La Heladería” que cuenta la historia de un grupo de amigos de Villa Santa Rita-Villa del Parque -su barrio- que abrieron una heladería en diciembre y la cerraron en enero.

“Soñadores temerarios y armadores de mil velas… de la noche a la mañana cucurucho y marihuana”, cuenta el tango escrito por Marquestó.

“La marihuana está en el ambiente tanguero porque muchos la consumen pero no se convierte en poética”, asegura el músico.

El Pueblo quiere saber

Alfredo Tape Rubín, uno de los nombres sobresalientes de la escena tanguera del nuevo siglo, le cuenta a El Planteo que “la generación que ingresó al tango en los ‘90 fue la que naturalmente vinculó ambos mundos. 

Tango Marihuana

Según su punto de vista “hasta ese momento no existían tangueros que fumaran marihuana”.

El fundador de El Cuarteto Almagro, que en su tema “Blues de Boedo” dice “la droga no progresa se lamenta el buey jipón” aclara que “esa letra habla de la fatídica merca” y que en sus letras no tiene “referencias a la marihuana”.

El bandoneonista Diego Maniowicz, que integra los grupos Astillero y Nox, asegura que “por suerte la marihuana está en un nivel de generalización en la sociedad que penetra en el tango como en otros ámbitos pero el tango no levanta una bandera como sucede en casos más obvios como el reggae o el trap”.

Contenido relacionado: Entrevista Exclusiva a Duki: ‘Me Regalan Porro para Vérmelo Fumar’

En cuanto a la cocaína, el músico -que además enseña a tocar el instrumento tanguero- dice que “el consumo” de la vieja guardia del tango “no era como el que estamos acostumbrados ahora sino una especie de ‘ayudín’ para aguantar y seguir laburando toda la noche”.

Tango Marihuana
Foto: Telam

En ese sentido Maniowicz plantea que si revisamos la historia “no hay ningún cantor, músico o bailarín de tango que haya muerto de sobredosis de cocaína. Esa idea del tango y la falopa hay que pensarla distinto a cómo vemos la falopa hoy en día”.

Acho Estol es el guitarrista, compositor y creador de La Chicana, que integra junto a su compañera Dolores Solá.

En el disco Revolución o Picnic (2011) incluyen un tango de su autoría llamado “Tres Hermanos” que dice:

Cuatro velas cada uno

y unas flores amarillas

cuatro porros se fumaron

en paciente seguidilla.

Consultado por El Planteo, el músico cuenta que “en ‘Tres Hermanos’ se fuman varios fasos pero es siempre más un accesorio de utilería realista que el tema abordado”.

¿Vos decís que habla del faso?

“Fumando espero” es un tango compuesto en 1922, con música del catalán Juan Viladomat Masanas y letra de Félix Garzo.

En una de sus estrofas dice:

Dame el humo de tu boca.

Anda, que así me vuelvo loca.

Corre que quiero enloquecer

de placer,

sintiendo ese calor

del humo embriagador

que acaba por prender

la llama ardiente del amor.

Grabado por Ignacio Corsini, Carlos Gardel, Libertad Lamarque, Argentino Ledesma, Carlos Dante, entre otros muchos otros, hay quienes revisando la letra dejaron entrever que podría hablar de la marihuana o hachís.

Hay que tener en cuenta que en los años 20, en grandes capitales como París y Madrid, ni la marihuana ni la cocaína estaban prohibidas y tampoco se condenaba socialmente a quienes las consumían, que, por lo general, eran artistas, bohemios, intelectuales (como Sigmund Freud) y personas de las clases altas.

Contenido relacionado: Libre de Humo: Consumir Cannabis sin Fumar

Quienes defienden esta teoría sostienen que “el humo embriagador” (que claramente es una alusión poética) no se refiere al tabaco sino a alguna sustancia alucinógena.

En otra estrofa suspicaz dice:

Mientras fumo,

mi vida no consumo

porque flotando el humo

me suelo adormecer.

Si se piensa en los distintos usos de la planta de cannabis, hay personas que la consumen para conciliar el sueño profundo y relajar.

Tal vez es rebuscada la historia y todo se trata de poesía e inspiración del autor pero la duda ante este tango perdurará para siempre.

Marihuana de Fierro

Adrián Ruggiero y Manu Barrios son bandoneonistas de la Orquesta Típica Fernández Fierro. Una noche de miércoles, en que la OTFF toca religiosamente en el Club Atlético Fernández Fierro (C.A.F.F.) de Sánchez de Bustamante 772 en el barrio de Almagro, se juntaron para hablar con El Planteo.

Tango Marihuana

A Ruggiero la marihuana lo acompaña cuando estudia y compone. “Soy de la época del prensado y la primera vez que vi flores fue en el 2005”.

El bandoneonista, hijo de un ilustre como Osvaldo Ruggiero que integró la orquesta de Osvaldo Pugliese y fue uno de los fundadores del Sexteto Tango, confiesa que “el faso es energía” y uno de sus rituales es el querido “mañanero con Pugliese al palo”.

Adrián, que también es docente de bandoneón, tiene sus plantas “con semillas que me regalaron mis amigos”. Su cultivo está “en macetas hechas en tachos de pintura” a las que le dedica “mucho amor”.

Por su parte, Manu Barrios se define como “un fumador social”. Cuenta que “en los años 2017 y 18 cultivaba” pero que ahora ya no tiene tiempo para dedicarle a las plantas.

Residente en el partido de Almirante Brown dice que su madre “usa aceite de cannabis con fines medicinales” y aclara: “Nunca fumo antes de tocar, siempre después”.
Como Ruggiero, Barrios, Marquestó y otros actores de la música ciudadana del presente, la marihuana está presente en sus vidas cotidianas y en relación con la música, pero no logra ingresar con fuerza a la poética del tango.

Fotos de cortesía.

Publicada originalmente en diciembre de 2021.

¿Tienes ideas o comentarios? Puedes contactarnos en info@elplanteo.com

Síguenos en Instagram, Facebook y Twitter.



Todo el material compartido por ElPlanteo.com tiene fines únicamente periodísticos e informativos.

ACERCA DEL AUTOR

Periodista, locutor y docente. Ha publicado en Anfibia, Orsai, Cosecha Roja, Infobae y medios extranjeros como La Vanguardia de España y la revista Lento de Uruguay. Escribe sobre cine en la revista Directores de DAC y en La Gaceta de Tucumán. Es productor del ciclo documental Elemento Vital -el único programa de Latinoamérica sobre el agua- y da clases de comunicación a artistas de los barrios de Soldati, Retiro, Barracas y Lugano de CABA.