Opinión: Es Hora de Reconocer el Uso de THC en el Deporte Profesional de EEUU

Por Jim Higdon, cofundador de Cornbread Hemp. 

Las pruebas de THC en los deportes profesionales están casi muertas, como debería ser (aunque no del todo). Todavía acechan en las esquinas como un zombie, listas para atacar. La Asociación Nacional de Baloncesto (NBA) puso fin a los controles aleatorios de sustancias, pero sigue manteniendo una política de controles “si existe un motivo”, lo cual impide que estos aboguen por la eliminación de los controles.

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La NBA hace bien en realizar pruebas para detectar sustancias que mejoren el rendimiento, lo que daría a sus jugadores una ventaja injusta. Pero el THC no es una droga que mejore el rendimiento. La única razón por la que el thc está prohibido en el deporte es la falsedad perpetrada por el gobierno federal de que el cannabis es una de las drogas más peligrosas del mundo. Y no lo es.

Durante décadas, las ligas deportivas han prohibido el cannabis insistiendo en que el THC es incompatible con el atletismo profesional. Nada podría estar más lejos de la realidad. Si la NBA impusiera hoy una política de tolerancia cero para el consumo de cannabis, no habría suficientes jugadores para un partido completo.

La legalización en los estados avanza más rápido que la NBA

Algunas estimaciones recientes sugieren que hasta el 85% de los jugadores de la NBA consumen cannabis, pero la NBA sigue perpetuando una farsa. Las ligas y los jugadores están atrapados en aparentar la prohibición del THC.

Los jugadores pueden esquivar las consecuencias de esa prohibición, siempre y cuando no hablen del tema. Este sistema de ‘guiño, guiño’ se ha agotado.

Las jurisdicciones con marihuana legal ya no son la excepción a la regla. Son la norma dominante en EEUU. Todos los equipos de todas las ligas deportivas tienen su sede en una ciudad con alguna forma de THC legal, incluso los que juegan en estados sin marihuana legal.

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La Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL) tiene 32 equipos. De ellos, 14 juegan en casa en un estado con marihuana recreativa legal, 11 en estados con marihuana medicinal y siete en estados sin marihuana legal: los Cowboys, los Texans, los Falcons, los Packers, los Colts, los Titans y los Panthers.

Las Grandes Ligas de Béisbol (MLB) tienen 30 equipos. De ellos, 16 juegan en casa en un estado con marihuana recreativa legal, 10 en estados con marihuana medicinal y cuatro en estados sin marihuana legal: los Brewers, los Braves, los Rangers y los Astros.

La Asociación Nacional de Baloncesto (NBA) tiene 30 equipos. De ellos, 14 juegan en casa en un estado o provincia con marihuana recreativa legal, ocho en estados con marihuana medicinal y ocho en estados sin marihuana legal: los Bucks, los Hornets, los Mavericks, los Spurs, los Rockets, los Hawks, los Grizzlies y los Pacers.

La Liga Nacional de Hockey (NHL) es la más expuesta al cannabis legal de todas las ligas debido al número de equipos que juegan en Canadá, donde el cannabis es totalmente legal. De los 32 equipos de la NHL, 22 juegan en una provincia con marihuana recreativa legal, siete en estados con marihuana medicinal y sólo tres en estados sin marihuana legal: los Hurricanes, los Stars y los Predators.

THC legal

Incluso en los 14 estados sin marihuana legal, el THC sigue siendo legal si se deriva del cáñamo, desde la aprobación de la Ley Agrícola de 2018. Mientras el THC provenga de una planta de cáñamo con no más del 0,3%, es legal.

Ese 0,3% de THC puede aparecer en un test de sustancias, amenazando la seguridad laboral de cualquier trabajador.

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Lo cual es incorrecto ya que el THC derivado del cáñamo es legal, incluso para los jugadores de los Dallas Cowboys y los Atlanta Hawks, en estados donde la marihuana es ilegal.

Inseguridad laboral

Ningún trabajador de EEUU debería enfrentarse a las consecuencias de dar positivo por una sustancia legal consumida fuera del lugar de trabajo. Millones de estadounidenses, desde enfermeras hasta camioneros, temen perder su trabajo si dan positivo por THC tras consumir productos legales de cáñamo.

En Cornbread Hemp, nuestra misión es mejorar la calidad de vida de nuestros clientes. Y estas políticas anticuadas de pruebas de THC representan obstáculos. Por eso, nos esforzamos por abogar por el fin de las pruebas de THC en el lugar de trabajo, comenzando con los deportes profesionales.

No podemos seguir mintiendo sobre el THC. Es tan usado como el ibuprofeno, tal vez más. Mantener la ficción de que los deportes profesionales están libres de THC es un acto de negación.

Ya es hora de que las ligas deportivas reconozcan que sus jugadores consumen THC el cual no afecta a su rendimiento en el trabajo, en lugar de exigirles que guarden silencio para que la liga pueda continuar con su farsa.

Es hora de poner fin a las pruebas de THC en el deporte profesional.

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Jim Higdon es cofundador de Cornbread Hemp, una marca de productos de cáñamo de espectro completo, es nativo de Kentucky y se graduó del Centre College, la Universidad de Brown y la Universidad de Columbia. En 2012 publicó Cornbread Mafia, lo que le llevó a una carrera periodística cubriendo Kentucky para el Washington Post y la política de cannabis para POLITICO.

Vía Benzinga, traducido por El Planteo.