¿Puede el Cannabis Ayudar a Tratar el Síndrome de Tourette?

Por João R. Negromonte.

El síndrome de Tourette es un trastorno del sistema nervioso caracterizado por movimientos repetitivos o sonidos no deseados. Suele manifestarse en la infancia y puede acompañar a la persona durante el resto de su vida. Asimismo, el tratamiento puede incluir medicación o terapias psicológicas.

En la actualidad, las terapias convencionales incluyen antipsicóticos de alta potencia, que pueden causar importantes efectos adversos en lxs pacientes. Por ello, la búsqueda de nuevas y prometedoras alternativas de tratamiento, como los cannabinoides, es cada vez más importante y necesaria.

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Las investigaciones demuestran que los compuestos del cannabis, como el cannabidiol (CBD) y el tetrahidrocannabinol (THC), pueden ser eficaces para los problemas de comportamiento y los tics causados por el síndrome de Tourette.

A continuación, explicaremos cómo el cannabis puede actuar en el tratamiento de esta patología que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), afecta al 1% de la población mundial.

Algunos estudios existentes sobre cannabis y síndrome de Tourette

Desde hace algunos años, son cada vez más frecuentes los diferentes ensayos clínicos que demuestran la eficacia de los derivados del cannabis para los trastornos del movimiento. Una de estas pruebas fue publicada en el 2003 por la revista Neuropsychopharmacology. Dicha investigación reveló que el THC, administrado durante un periodo de seis semanas y con una dosis de 10 mg, ayudó a 24 pacientes con Síndrome de Tourette.

Durante este período, lxs pacientes demostraron una evolución de la capacidad verbal y cognitiva. Tras seis semanas de tratamiento, con la retirada del THC, no se observó ninguna disminución de la memoria visual, la atención o el aprendizaje en lxs pacientes que participaron en el estudio. Lxs investigadores también identificaron una evolución en los déficits cognitivos agudos causados por la enfermedad.

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Otro estudio, publicado en el 2020, midió los niveles de importantes cannabinoides en el líquido cefalorraquídeo. Éste es un fluido biológico que está en estrecha relación con el sistema nervioso central (SNC) y su entorno. En la investigación, se comparó a pacientes adultos con síndrome de Tourette con un grupo de control sin tal diagnóstico.

Lxs investigadores descubrieron que existe una relación entre los compuestos anandamida (AEA), anaquidonoglicerol (2-AG), una molécula similar a los endocannabinoides, la palmitoil etanolamida (PEA) y el lípido ácido araquidónico (AA), con algunos sistemas de neurotransmisores. Esto deja claro que existe una relación primaria entre el control del sistema endocannabinoide y el síndrome de Tourette. Así, dicha asociación ha demostrado que, dependiendo de los niveles de estos compuestos, lxs pacientes con esta condición pueden controlar los tics y los espasmos involuntarios.

Por supuesto, estos son sólo algunos de los estudios existentes. Todavía se necesitan más conocimientos médicos y prácticas clínicas para probar la relación entre el síndrome de Tourette y los compuestos del cannabis. Sin embargo, son pasos importantes hacia el desarrollo de nuevas investigaciones.

Vía Sechat, traducida por El Planteo.

Foto por ian dooley vía Unsplash