Marimba: Las ‘Páginas Amarillas del Cannabis Argentino’, ¿Camino a un E-Commerce 420?

Para un desarrollo integral, la industria del cannabis se requiere de redes de distribución seguras, verificadas, orientadas a las necesidades del usuario.

A menudo, cuando hablamos de industria, nos concentramos en el cultivo o la manufactura del cannabis, y de hecho, esa fijación con los cogollos puede ocultar partes esenciales de su cadena de valor como por ejemplo, la comunicación y distribución.

Una distribución incompleta y la falta de canales de comunicación puede hacer colapsar la industria y desproveer a los usuarios de productos seguros e información. Por eso las redes de distribución descentralizada, al estilo dropshipping, o e-commerce, son un insumo fundamental para que las empresas de cualquier tamaño operen de manera más eficiente y los productos lleguen a las y los usuarios.

Algunas de las operaciones más conocidas de este tipo son Leafly, Eaze, Weedmaps o empresas como Posibl en California, y un e-commerce cannábico puede funcionar de mil formas distintas.

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Las empresas pueden conectar minoristas con clientes, acoplar pedidos según los requerimientos del minorista, o pueden comprar productos de un tercero, y confiar en el distribuidor para el cobro y el reparto. En cualquiera de estos casos, contar con una red de pacientes y herramientas de comunicación asertivas es fundamental para los pacientes y la industria. 

En la Argentina en particular, la creación del Registro del Programa Cannabis (REPROCANN) abrió la puerta a un sinnúmero de pacientes con la necesidad de consumir cannabis y servicios asociados, que muchas veces desconoce la legislación o cómo acceder a un tratamiento con cannabis.

Fue en una charla de café donde Francisco y Anita comenzaron a pensar en ideas para la nueva industria argentina y, rápidamente, notaron la necesidad de la gente de contactarse con médicos que hicieran inscripciones al Programa.

Marimba.com.ar

“Con la idea de armar un directorio de médicos que terminó siendo unas páginas amarillas de cannabis. La idea de Marimba es que estén todos, paramédicos, abogados, bancos de semilla y asociaciones de ingenieros agrónomos”, explica Francisco.

“Tenemos banners publicitarios y suscripciones. La suscripción anual puede ser gratuita, destacada o premium. El 2022 fue el primer año que empezamos a cobrar. Lo ofrecemos para que los profesionales y emprendedores se vayan sumando. El espacio gratuito siempre está”, agrega el cultivador y trabajador de la comunicación.

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Si bien existen otras páginas de EEUU que pueden servir como hoja de ruta, Francisco las considera “un norte”, no necesariamente un servicio para calcar en Argentina.

“Es un poco lejano por la legislación que tenemos. Todavía no podés encargar un gramo y pasar a buscarlo o que te lo envíen. Podríamos agregar el servicio de delivery también. Pero lo vemos como algo a futuro”, dice Francisco calmando los ánimos.

Al paso de la Ley Nacional

En términos de cannabis medicinal e industrial, los emprendedores detrás de Marimba miran con buenos ojos la nueva legislación argentina. Una vez reglamentada la Ley 27.669, sancionada en abril de 2022, debería autorizar la producción de alimentos, suplementos nutricionales y productos industriales de cáñamo, que necesitarán una vía de comercialización competitiva.

“Vamos acompañando la legislación, acompañando el crecimiento de la industria. Y sí, hay una idea de que Marimba también sea un e-commerce, en el futuro, donde se pueda comprar algún producto y que te llegue a tu casa”, suma Francisco.

Entiende que si bien para comercializar productos farmacéuticos es necesario cumplir con ciertos protocolos, la cadena de valor del cannabis ofrece mucho más que aceites y comprimidos, desde suplementos hasta productos de higiene que se deberían poder comercializar bajo estándares más accesibles al mercado local.

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Aun así, mientras la reglamentación de la Ley de Cannabis Medicinal e Industrial esté pendiente, comercializar productos de cannabis puede resultar en un alto riesgo. Básicamente porque no existen todavía las reglas que indiquen cómo producir y procesar cannabis para el mercado argentino.

“Este pequeño modelo de negocio de información lo tenemos resuelto. Si yo soy el responsable de la venta del producto, tengo que verificar la calidad y eso es una responsabilidad enorme”.

Sin embargo, existirán productos menos controversiales, que de aprobados por la Autoridad Provincial de Alimentos, por ejemplo, se podrán distribuir. Productos que no son farmacéuticos pero son derivados del cannabis.

“Sí, todo lo que tiene relacionado con la industria del cáñamo se va a poder comercializar tranquilo supuestamente. Yo creo que el futuro del e-commerce es ese, es empezar a integrar productos que estén dentro de la ley. Estamos como esperando un poco a ver cómo avanza la legislación argentina”, completa Francisco.

Marimba 2.0

A la hora de escalar, Marimba puede necesitar socios, desde distribuidores hasta empresas de seguridad que le ayuden a completar las órdenes y hacer los envíos. Una opción, sería, por ejemplo, una asociación entre la plataforma web y un centro de acopio cercano a centros urbanos que permita hacer los envíos de manera más eficiente, reduciendo costos y emisiones.

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“Una Marimba 2.0 si quieres llamarla. No lo estamos proyectando por ahora pero estamos abiertos a posibles inversores o alguien que se quiera asociar para hacer crecer la plataforma. La idea es que la comunidad vaya creciendo y que cada vez sea más grande y poder ofrecer cada vez más servicios. Hay que salir un poco de las redes. Por eso hablo de armar una comunidad para darle lugar a un gran emprendedor”, detalla Francisco.

En esa posibilidad de potenciar pequeñas unidades productivas, Marimba puede asociarse con agentes de la economía social como cooperativas y ONGs.

Por un lado, esto permitiría reventar aún más el REPROCANN y, por el otro, dinamizar la financiación de las organizaciones. Pero, ¿cómo asegurarse de que no existan estafas?

Marimba trabaja con plazos de revisión. Eventualmente todos los avisos están verificados con una tilde. Entonces, ¿puede ser la tilde de verificación una marca que sirva a emprendedores para crecer en la industria y el mercado local?

“Nuestro espacio está abierto, es 100% gratuito para todas las organizaciones que estén generando ingresos para funcionar y unidades de negocios. Porque es la forma de devolverle un poco todo lo que han trabajado en estos últimos 20 años”, adelanta Francisco y explica que la plataforma se piensa dentro de un nicho de mercado.

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“Buscamos no competir con los grandes del comercio electrónico o los negocios que ya tienen su plataforma online. Pienso en el e-commerce el día de mañana como algo muy selecto. Si quiere llamarlo de productos puntuales. No voy a vender sustratos, ¿me entendés? Siempre el nicho”, dice Francisco.

Para cualquier e-commerce de cannabis el cuello de botella suele ser la certificación. Por eso, en el futuro, Marimba busca conectar a pequeños laboratorios y productores que estén operando dentro de la legislación para dar viabilidad comercial a sus productos.

“Necesitamos una reglamentación de la Ley para que también los productores se acomoden”, concluye Francisco.

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