Las Mejores Hamburguesas de Buenos Aires
Las hamburguesas son mucho más que la última tendencia alimenticia: son una elección de estilo de vida. Está científicamente probado que la gente es instantáneamente más feliz mientras se come una hamburguesa increíble; así que imagina la delicia antidepresiva comestible de ver el party bus de las hamburguesas llegar por fin a Buenos Aires.
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En Buenos Aires, las hamburguesas son la última moda. Siguiendo las huellas de muchas de las principales ciudades, lxs porteñxs se están alejando de las tonterías de Barfy para complacer al público con hamburgueserías dedicadas a la hamburguesa jugosa, el pan casero y el estilo de vida de los mejores aderezos. Y así comenzó mi desafío de gordita: ir en una búsqueda obsesiva para encontrar la hamburguesa con la cual contraer matrimonio. Y afortunadamente, muchas pretendientes elegibles causaron una impresión duradera.
NdE: Los precios se corresponden con la fecha de publicación original del artículo en 2015.
Pony Line (Hotel Four Seasons, Posadas 1086, Recoleta)
La verdad: En el momento en que hundí mis dientes en la hamburguesa de Pony Line, quise llevarla directamente a una habitación en el Four Seasons para hacerle cosas sucias. Así es, nada de sucios telos para esta hamburguesa. Estamos hablando de la Suite Presidencial de un hotel de cinco estrellas… spa, masaje, champán, TODO.
El amor: Tuve la suerte de que el Chef Ejecutivo Juan Gaffuri me llevara tras bastidores para presenciar la vida de la hamburguesa de Pony Line. Empezó en la concepción, donde una carne de res seca añejada durante 45 días se convierte en una hamburguesa mega grasosa, asada a medio cocer, y construida con condimento de pepinillos caseros, lechuga crujiente, rodajas de tomate, alioli casero, queso cheddar Lincoln *de verdad*, colocada en medio de un pan de brioche mantecoso. Las chicas con clase no son baratas, pero el precio de 230 pesos vale esta hamburguesa de primera.
Tierra de Nadie (Avellaneda 588, Caballito)
La verdad: Metido en tierra de nadie en Caballito, este agujero en la pared que sirve delicias yanquis demuestra ser un raro diamante en bruto. Dave, chef y propietario, aprendió todo tipo de secretos de las hamburguesas trabajando en Kansas, y aporta su propio punto de vista sobre lo que significa mandarse alta hamburguesa.
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El amor: Una mirada a la hamburguesa de Tierra de Nadie e instantáneamente querrás envolver tu sucia boca alrededor de ella, inhalándola inapropiadamente en sólo unos pocos bocados. Elije entre las opciones de hamburguesas de lujo de tus sueños, como la TDN Burger, rellena de “cheddar” y empapada con cebollas caramelizadas y salsa a elección (recomiendo el bourbon). O la 3Hot Chilli Peppers, con jalapeños y chiles encurtidos, y una salsa rocoto picante. Puedes elegir el crónico acompañado con MOLLLLLLEJAS y berenjena al escabeche, o por el sándwich doble, donde el pan está cubierto con una capa de queso crujiente.
Bar Dellepiane (Pasaje Luis Dellepiane 685, Recoleta)
La verdad: Una pareja argentino-estadounidense obsesionada con las hamburguesas viajó por los Estados Unidos en busca de la mejor hamburguesa… y regresó a Buenos Aires para traer su propia versión. Además: este bar de hamburguesas está ubicado en uno de los pasajes escondidos más geniales de la ciudad.
El amor: El menú incluye varias hamburguesas, y una especial que cambia semanalmente. Ante la duda, siempre pido la hamburguesa con el nombre del lugar… y en este caso, la Dellepiane está coronada con cebollas asadas, salsa especial, doble queso, doble panceta, doble diversión.
UCO (Soler 5665, Palermo Hollywood)
La verdad: Podemos culpar a la perra fritadora de pollo de NOLA por esta gloria de Uco entre panes, que se quejó al Chef Ed Holloway de que no había hamburguesas decentes en Palermo Hollywood. Ella lo desafió a hacer su propia interpretación, y él salió con este chico malo. La misión: honrar a Argentina en forma de hamburguesa.
El amor: En lugar de copiar el arte norteamericano de la hamburguesa, Uco se propuso rendir homenaje a los dones naturales de Argentina con un toque porteño: una mezcla de carne asada y hamburguesa de panza de cerdo ahumada con quebracho, cubierta con queso provoleta, panceta, sofrito, pepinillos caseros, y servida en un pan de campo modificado. ¿El acompañamiento? Papas fritas de polenta, chabón. ¿Coste? 150 pesos. Sólo para la hora de la comida.
180 Burger Bar (Suipacha 749, Centro)
La verdad: 180 hace un vuelco de 180° con respecto a la mayoría de la competencia del microcentro – dejando a lxs comensales del centro de Buenos Aires elegir su propia aventura de hamburguesas de 180 gramos. Es un hermoso espectáculo ver a hombres en trajes de negocios, desvergonzados, comerse una hamburguesa gigante, dejando que los jugos caigan por su barbilla mientras abrazan a esta fantástica bestia.
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El amor: Cubre la hamburguesa con una selección de salsas caseras como barbacoa, mayonesa chimichurri, tzatziki, tartar o dijonesa (mayonesa + mostaza); y aderezos como panceta, huevo frito, queso provolone o jamón.
Burger Joint (Borges 1766, Palermo Soho)
La verdad: Unx puede argumentar que este antro es el culpable que inició toda esta manía de las hamburguesas en Buenos Aires. Pionero en su clase de comida, este lugar tranquilo con una divertida onda grunge sirve buenas hamburguesas junto con papas fritas crujientes con ketchup curry. Y por supuesto, cualquier hamburguesería que proyecte a Seinfeld sin parar automáticamente gana mi devoción sin fin. Porque Seinfeld es vida.
El amor: BJ lo mantiene simple: Clásica, Azul, Jamaiquina, Cabra y mi favorita, la Mexicana – apilada con guacamole, jalapeños y salsa BIEN PICANTE. La americana también es una favorita mía, porque soy muy patriótica.
Burger Mood (Viamonte 359, Centro)
La verdad: Lxs comensales del microcentro se han contagiado un poco la histeria de las hamburguesas. Porque ¿quién quiere comer un triste sándwich de kiosco o en un sombrío buffet chino? Lxs fabricantes de Green Curry lo hicieron bien de nuevo, ayudando a lxs clientes a entrar en un sensual ánimo hamburguesero con esta asequible hamburguesería.
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El amor: El menú se divide en tres partes: 1. Hamburguesas sugeridas como la Cuate (palta, cheddar, tomate, cebolla asada, ketchup picante). 2. Diseña tu propia hamburguesa, eligiendo la salsa y los ingredientes. 3. Hamburguesa de la semana especial, como esta hamburguesa Kimchi.
El Banco Rojo (Bolívar 914, San Telmo)
La verdad: Ningún viaje a San Telmo está completo sin una visita a EBR. Mientras que el menú incluye platos de comida rápida que no son hamburguesas, siempre que el combo de carne y pan sea especial, sabes que puedes confiar en el resultado.
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El amor: Cada semana el Banco Rojo nos regala una nueva receta de hamburguesa. Como esta sexy y caliente hamburguesa enfrente mío: La Dulce Antonella, con queso, tocino, huevo poroso, salsa de chile dulce y mayonesa de berenjena.
Menciones de honor
La majestuosa hamburguesa Lord Hector en el Loreto Garden Bar (Virrey Loreto 2912), la hamburguesa del camión de comida de Sweet Pepper’s (Los Mimbres 1220, Tigre), la hamburguesa al aire libre de El Puesto de Fabio (Roque Sáenz Pena 1159, San Isidro) y las monstruosidades de anillos de cebolla de Illegal Burger’s (Talcahuano 959).
Consejos sobre lo que hace una hamburguesa impresionante:
- La carne molida tiene que ser de alta calidad y no estar sobrecargada. Por favor, no acaricies la carne como lo harías con tus bolas sudorosas durante el verano. Y de nada por esa apetitosa imagen mental.
- El pan debe estar recién horneado y ser lo suficientemente fuerte para mantener la monstruosidad unida. El pan blando y baboso me da ganas de llorar. Los panes de Bimbo me dan ganas de vomitar.
- Los toppings deben ser simples, pero creativos y distribuidos inteligentemente.
- Las salsas no deben salir de botellas de plástico comerciales o paquetes estúpidamente pequeños imposibles de abrir. Puntos extra cuando son caseras y lo suficientemente adictivas como para que quieras llevártelas a casa y asfixiarte con todas.
- La cocción de la hamburguesa en sí hace la diferencia (chocolate por la noticia). Es una locura que la mayoría de los lugares no pregunten cuánto lxs comensales quieren que se cocinen sus hamburguesas. **IMPORTANTE** Si eres una chica a la que le gusta jugosa, asegúrate de decirle a tu mozx. De lo contrario es probable que termines mordisqueando un pedazo de carne seco y demasiado cocido.
- Cheddar, eres una mentira. Toma tu falso color naranja y vete a casa. Pero desafortunadamente en estos días, la pelea del cheddar artificial no se puede ganar.
- Siempre que algún lugar se autoproclama como la mejor hamburguesería del planeta, sé escépticx.
- Lee el Manifiesto de la Hamburguesa de David Chang.
- Las papas fritas importan.
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Quiero mencionar a mis verdaderos amores de las hamburguesas:
Hamburguesa con queso en Au Cheval en Chicago.
Y la Bleecker St. Black Burguer en Londres.
Más sobre hamburguesas en Buenos Aires:
Burger Facts
Burger Kid
The Burger Life
Vía Pick Up The Fork, traducido por El Planteo.
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