Conoce Stardust, el Robot que ‘Glasea’ Prearmados de Cannabis

Los porros prearmados son un importante motor de crecimiento en el mercado del cannabis, en el que las empresas se centran cada vez más en ofertas de primera calidad. Presentan una amplia gama de configuraciones, lo que permite a las marcas dirigirse a nichos específicos o ampliar su alcance a una base de consumidores más amplia.

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En una reveladora entrevista con El Planteo, Nohtal Partansky, cofundador y CEO de Sorting Robotics, presentó Stardust, su último robot diseñado para recubrir o ‘glasear’ porros y diversificar el segmento de los prearmados en la industria del cannabis.

La continuidad en el mercado

Partansky destacó que, si bien su robot Jiko infusionaba internamente los prearmados de manera eficiente, había una creciente demanda de una solución automatizada para el recubrimiento externo o bañado con kief, en línea con la evolución de las preferencias de los consumidores.

En 2019, cuando la ola de prearmados estaba despegando, el mercado se centró principalmente en la infusión interior para la potencia. Sin embargo, ciertas marcas pioneras de cannabis están cambiando la dinámica de los consumidores, subrayando la importancia de la infusión exterior del producto.

Stardust, experto en glaseado de porros

Este enfoque no sólo mejora el porcentaje de THC, sino que también añade atractivo estético. Partansky comparó los prearmados recubiertos con una dona glaseada con confites de colores, destacando la importancia de la estética además de la potencia.

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“Las marcas buscan la infusión exterior del producto, sobre todo por el atractivo estético, parecido al de una dona glaseada con confites de colores. Puede que los confites no aporten mucho, pero tienen un aspecto atractivo y ofrecen una sensación única en boca, algo con lo que me identifico. Esta mentalidad, especialmente prevalente en los últimos años cuando comercializábamos Jiko, lo situaba como una alternativa para la infusión del exterior del producto”, afirmó.

“Sin embargo, a principios de este año, me di cuenta de que los clientes inyectaban y aplicaban kief, lo que indicaba un claro cambio del mercado hacia ambos procesos. Así que decidimos desarrollar una solución que cubriera ambas necesidades“, agregó.

El Stardust para cannabis facilita el trabajo con material pegajoso

El desarrollo de Stardust planteó retos de ingeniería únicos. Sorting Robotics tuvo que tener en cuenta los intrincados requisitos del recubrimiento exterior de kief para los prearmados, que implican procesos complejos y desordenados.

En cuanto al funcionamiento de Stardust, Partansky explicó que el proceso comienza con la colocación de porros, blunts u otros tipos de prearmados en pequeños soportes denominados vainas.

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A continuación, estas vainas se cargan en la máquina. Un brazo robótico dentro de la máquina puede recoger ocho vainas a la vez, lo que permite un procesamiento eficiente, con un resultado aproximado de 16 porros recubiertos por minuto. Sin embargo, está previsto aumentar la capacidad a 12 vainas a la vez, lo que aumentaría el ritmo de producción a unas 24 juntas por minuto.

La máquina consta de varias estaciones clave, entre ellas una de pulverización y otra de inmersión.

En la estación de pulverización, las juntas se rocían individualmente a 360 grados con pegamento destilado o pegamento puro, creando una capa fina pero pegajosa. Encontrar el tipo correcto de boquilla y conseguir las características de pulverización adecuadas, como temperatura, viscosidad y presión, fue una tarea compleja.

Posteriormente, los porros pasan a la estación de inmersión, donde se recubren con kief, diamantes triturados, hachís de burbujas o material de cannabis en polvo.

El Stardust ayuda a ahorrar costos en la fabricación de prearmados de cannabis

Partansky destacó que este proceso automatizado con el Stardust minimiza los problemas habituales asociados a los recubrimientos manuales del kief, como el exceso de pulverización, la aplicación desigual y el desorden.

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La máquina funciona en un entorno controlado, lo que evita la pérdida de materiales. El resultado es un proceso racionalizado y eficiente que elimina la necesidad de 5 a 10 operarios manuales y reduce toda la operación a un solo operario.

Evitar restricciones

El Stardust resuelve una restricción común en la industria y permite un mayor crecimiento y rentabilidad. En promedio, las empresas que utilizan la máquina podrían ahorrar al menos USD 10.000 al mes. Esta cifra se basó en las reducciones de costos de mano de obra y producto logradas gracias a la automatización.

La velocidad de la máquina ofrece un aumento significativo de la eficacia en comparación con los procesos manuales, lo que puede suponer un ahorro de decenas de miles de dólares mensuales para las empresas, en función de su escala de producción.

Innovaciones clave: El tornado kief

El problema más común en la producción en masa de juntas recubiertas es conseguir un glaseado uniforme.

A menudo, los recubrimientos como el kief o el bubble hash de estas juntas se aplican de forma desigual, pareciéndose a un crumble de manzana, lo que provoca bordes afilados o sueltos que hacen que el material se desprenda.

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Para solucionar este problema, Sorting Robotics desarrolló una técnica de “tornado de kief”, que garantiza que cada partícula esté meticulosamente alineada, sin solapamientos.

En este proceso se secan millones de tricomas, pequeñas glándulas cristalinas de la superficie de la planta, ricas en terpenos y beneficios terapéuticos, que se distribuyen uniformemente por la superficie del porro con la ayuda de un viento de alta velocidad.

Si se observan de cerca, los tricomas aparecen perfectamente estacionados unos junto a otros, lo que da lugar a una distribución suave y uniforme del kief que confiere al porro un aspecto escarchado.

Partansky explicó que cuando los porros pasan por el “tornado de kief” de la estación de inmersión, el proceso es similar al de un chupetín que atraviesa una tormenta de polvo.

“Si tienes un chupetín y al final pasas por una tormenta de polvo, ese chupetín va a tener una capa uniforme de polvo por toda la superficie del chupertín”, explicó Partansky.

¿Tiene el Stardust para cannabis un modo moonrock?

El modo moonrock de la Stardust permite a la máquina aplicar capas de keif, diamantes triturados con THC u otros materiales para crear patrones y diseños intrincados en los porros recubiertos.

Partansky destacó la versatilidad de esta función, comparándola con la creación de obras de arte y ofreciendo un sinfín de posibilidades para mejorar la estética del producto.

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También mencionó que la capacidad de Stardust para producir de forma eficiente y constante moonrocks u otros productos recubiertos a escala podría abrir nuevas oportunidades para que las empresas añadan valor a sus ofertas.

“Creamos una niebla de destilado o adhesivo y luego hacemos girar el porro en esa niebla durante un tiempo preciso, lo que permite que se adhiera uniformemente. El tiempo de permanencia en la niebla puede prolongarse para obtener una capa más gruesa, como hicimos al experimentar con los moonrocks”, explicó Partansky.

“Para éstas, dejamos el cogollo más tiempo en el destilado y luego en el kief, repitiendo el proceso para crear capas. Básicamente, el Stardust hace pasar el cogollo de cannabis por una nube de destilado, que lo vuelve pegajoso, seguida de una ‘tormenta de polvo’ de kief. El resultado es una capa uniforme de kief y destilado sobre el cogollo”, detalló.

Una torta en capas

“Para el modo moonrock, se cargan los cogollos en lo que llamamos ‘vainas’, pero estas vainas utilizan un pequeño dispositivo parecido a una horquilla en lugar de sujetar el cogollo directamente. Esta horquilla agarra el cogollo, asegurándose de que quede bien sujeto. A continuación, el proceso consiste en girar el cogollo para conseguir una cobertura uniforme, superponer el destilado y el kief repetidamente hasta alcanzar el grosor deseado“, concluyó Partansky.

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“Lo más interesante es la versatilidad del sistema, que permite una gran variedad de capas. Por ejemplo, se pueden crear capas de moonrocks con varias capas de kief, seguidas de capas de diamantes triturados con THC. Esta técnica puede hacer que el producto final se parezca a una torta con capas cuando se corta”.

Vía Benzinga, traducido por El Planteo.

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