Bebidas con THC: Todo Sobre el Vino de Cannabis
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Ninguna bebida ha escapado de convertirse en una infusión de cannabis, ni siquiera el vino. El vino con infusiones tiene raíces muy remotas, aunque el vino de marihuana es un producto muy diferente a lo que podía beberse en el antiguo Egipto. También, la producción moderna de vinos viene con desafíos únicos, por toda la infraestructura que es creada junto al desarrollo de las leyes.
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Al igual que otras bebidas contemporáneas con infusión de THC, el vino de cannabis participa en la creciente tendencia de cambiar al alcohol por la marihuana. El vino de cannabis abastece a un público de nicho, ofreciendo una posibilidad para la gente que quiere una bebida social y relajante que no sea cerveza de marihuana o cócteles locos.
Hablamos con empresarixs y productores de vino de marihuana para comprender mejor el emergente mundo del vino con infusión de cannabis y los desafíos a los que se enfrenta esta nueva industria.
¿Qué es el vino de marihuana?
La historia del vino con infusión de cannabis puede ser sorprendente. Cynthia Salarizadeh, fundadora y presidente de House of Saka, señala: “El vino con infusión de cannabis existe desde hace miles de años, es uno de los productos originales de la marihuana. Es menos una tendencia y más un resurgimiento, ahora que las reglamentaciones y la industria han madurado lo suficiente como para que la gente lo quiera volver a hacer”.
El vino de cannabis que se puede encontrar en los dispensarios es vino sin alcohol, mezclado con una emulsión de THC o CBD, lo que significa que el alcohol se elimina del vino antes de que se infunda con cannabis. Se ve y se sirve como una botella de vino normal, pero con un sabor ligeramente diferente debido al proceso de desalcoholización y aditivos extra que reintroducen el sabor y la textura. El cannabis es quien le da a la bebida sus efectos.
Mientras que las versiones antiguas del vino eran combinaciones entre la planta y el alcohol, las regulaciones actuales prohíben la mezcla del cannabis y el alcohol. Las leyes también prohíben que se use el término “vino” para su envasado y comercialización. El vino de marihuana, como la cerveza con infusión, debe ser desalcoholizado antes de que entre en contacto con el cannabis.
¿Cómo se infunden los vinos de cannabis?
La cadena de producción de vino de marihuana es complicada, y en ella intervienen como mínimo tres empresas distintas: la empresa que proporciona la solución de cannabis, el productor de la bebida y el distribuidor, que luego reparte el producto a los dispensarios para su posterior venta. Han surgido nuevas empresas, abriendo un camino de infraestructura que nos hace pensar en las bebidas infundidas a largo plazo.
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Una vez que se ha quitado el alcohol, las “vin-fusiones” (como las describe House of Saka) se envían a un fabricante que tiene una licencia para infundir bebidas con cannabis. Las nanoemulsiones, un proceso de descomposición de las partículas de cannabis en componentes tan pequeños que se mezclan fácilmente con líquidos, son el principal método de infusión de cannabis en las bebidas. Esto se debe a que las nanoemulsiones son estables cuando se mezclan con líquidos y pueden hacerse relativamente inodoras, incoloras e insípidas.
Ben Larson, director general de Vertosa, una empresa especializada en nanoemulsiones de cannabis, explicó que las nanoemulsiones no son una tecnología de talla única, y señaló que la solución actúa de manera diferente dependiendo de con qué se va a mezclar e incluso envasar. Vertosa personaliza la emulsión de cada cliente, adaptándola a las necesidades de su producto específico. El vino es delicado en el paladar y no quieres contrarrestarlo con ningún sabor o textura desagradable.
Aunque son eficientes y las preferidas para la mayoría de las bebidas, las nanoemulsiones no son el único camino a seguir. Josh Lizotte, fundador y director general de Rebel Coast, la primera compañía que lanzó vinos con infusión de cannabis, advierte que “no conocemos los efectos de la nanotecnología sobre la salud ni cómo interactúa con el cuerpo”. Por eso, optan por un proceso que encapsula las moléculas de cannabis para evitar su aglutinación.
Una vez que una bebida no alcohólica y una solución de cannabis están listas para ser combinadas, se transfieren a una empresa como Spacestation, que está legalmente autorizada a infundir productos con cannabis antes de ser enviados a los distribuidores para su eventual venta en los dispensarios. Spacestation se encuentra en una posición única e importante, asegurando la síntesis y la cooperación de tres compañías diferentes para un producto final.
Botellas más grandes, problemas más grandes
Además de los desafíos compartidos con otras bebidas infundidas, la logística de las grandes botellas presenta desafíos exclusivos del mercado del vino. Salarizadeh se lamenta: “Las restricciones a las bebidas infusionadas son una locura para empezar, pero las posibilidades de cualquier bebida similar al vino son aún más restringidas. Las regulaciones son muy favorables en cuanto a los frascos de una sola porción o los cierres a prueba de niños”. Por ejemplo, en el 2020 las botellas deberán ser re-sellables y a prueba de niños.
Tracy Mason, cofundador y director general de House of Saka comparte la opinión sobre el desafío extremo que esto representa al explicar que “la tecnología que se está desarrollando realmente no existe. Tenemos que cumplir con un estándar que todavía no existe siquiera en otra industria”.
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Las botellas estándar de 750 mililitros, que contienen cinco porciones cada una, son más difíciles de distribuir que bebidas de cannabis que suelen estar envasadas en botellas o latas de una sola porción; la infraestructura para trasladar esas botellas tuvo que ser creada por marcas pioneras en California, y todavía no existe en la mayoría de los estados.
La cultura del vino de marihuana
¿Qué distingue a los vinos de cannabis? En primer lugar, el público. La gente que quiere una relajante bebida sin alcohol que no les traiga una resaca horrible.
Alana Burstein, fundadore y presidenta de Viv & Oak, lo expresa de manera simple: “Toda nuestra misión es ofrecer una solución para las personas que no beben alcohol, como yo. Nuestro mercado objetivo son las mujeres entre 35 y 65 años. Este público en particular puede estar desatendido a causa de la abundancia de otras infusiones de soda y cerveza. Al igual que con el vino normal, hay presente un elemento de lujo y de interacción social que estas marcas encarnan.”
Otro gran atractivo del vino con infusión de cannabis es la capacidad de controlar las dosis. Al igual que otras bebidas infundidas, los vinos de marihuana ofrecen una dosis baja que se pone en marcha relativamente rápido – dentro de los primeros 20 minutos – y dura alrededor de una hora. Esto está muy lejos de los primeros prototipos, ya que Larson señaló que “muchas de las bebidas de infusión con las que la gente estaba familiarizada en el pasado eran azucaradas y de alta potencia, muy parecidas a un líquido comestible: si lo tomabas, su efecto tardaba en llegar, era una experiencia muy pesada y no fomentaba la interacción. Los vinos contemporáneos ofrecen un efecto relajante, similar al de una copa de vino normal”.
Rebel Coast lleva las cosas al siguiente nivel al combinar diferentes cepas de cannabis con diferentes variedades de uva, personalizando la sensación y el sabor de cada vino. Su sauvignon blanc está impregnado de sativa para una sensación eufórica, risueña y activa, e incluye terpenos patentados que reproducen los sabores naturalmente herbáceos del propio vino. El rosado tiene una infusión de una híbrida índica, destinada a tener un efecto sobre el cuerpo que resulte poco exagerado para la cabeza.
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“Nos interesa la experiencia del consumidor, no sólo algo que te haga volar. Añadimos terpenos específicos derivados del vino para que interactúen con el THC y te den un subidón diferente. Estamos generando el subidón y la experiencia, no sólo drogando a la gente”, dice Lizotte.
¿Es rico?
A diferencia de la cerveza, el vino no comparte ningún compuesto de sabor identificable con el cannabis. Muchos experimentos han dado como resultado vinos que ofrecen un gran subidón, pero que son difíciles de beber a sorbos.
“Hasta hace aproximadamente un año, los vinos de cannabis eran asquerosos, sabían a agua de pantano mezclada con agua de bong. Quienquiera que lo consumiera le echaba suficiente azúcar como para matar a un pequeño animal de granja”, dice Salarizadeh, sin pelos en la lengua.
Ahora que se dispone de la tecnología de emulsiones neutras de cannabis, el mayor obstáculo es tener suficiente sabor para satisfacer al bebedor de vino.
Viv & Oak añade taninos, el elemento del vino tinto que te seca la boca, para preservar la sensación en la boca y el cuerpo del vino. Pero, aunque que las infusiones pueden ser una bebida deliciosa, “sería injusto compararlas con el vino regular”, como admite Lizotte, “No vas a conseguir vino de clase internacional. Estamos tratando de imitar el sabor del vino, pero el alcohol tiene una gran sensación en la boca y su sabor es un giro al vino clásico”.
Doug Frost, maestro sommelier y maestro de vino, está de acuerdo y señala que es una buena noticia para la industria del vino de calidad: “si vendesvino de calidad superior, no debes sentirte amenazadx por los vinos con infusión de cannabis. Hasta ahora nadie está produciendo vino de primera calidad con infusión de cannabis”.
¿Qué es lo que viene?
A medida que las marcas pioneras continúan construyendo su infraestructura en cumplimiento con las leyes, que evolucionan rápidamente, se abre el camino para la aparición de más productos. Como CEO del primer vino legal de infusión de cannabis, Lizotte da la bienvenida a lxs recién llegadxs. “La competencia es buena para la industria en general“, dijo Lizotte. “Cuanta más gente venga al negocio, más conciencia y educación tendrán lxs usuarixs”.
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Bradley Mora, Director General de Spacestation, resume algunas de las razones por las que él y otrxs se han interesado en la industria de las bebidas de cannabis, “la bebida es el formato más accesible para nuevxs consumidores de cannabis: elimina todas las consideraciones perjudiciales para la salud que tiene el fumar y se asimila mejor a los hábitos sociales de las personas“. Su compañía está comprometida con la normalización de las bebidas de cannabis como una forma de consumo regular en los próximos años.
Además de ser agradable y accesible, Mason señala el elemento de seguridad y responsabilidad que ofrecen las bebidas, “porque eres consciente de dónde estás paradx en el espectro de sobriedad-intoxicación”. Como veterana de la industria del vino, reconoce la importancia de consumir responsablemente, “es importante que hablemos del cannabis en la misma línea que hablamos del alcohol. Es agradable, bello y está destinado a la relajación y la celebración, pero tiene que ser disfrutado responsablemente”.
En última instancia, el objetivo para las personas detrás de la producción, como Larson, es ver que el vino de cannabis sea acogido como una experiencia de bebida completa. Sobre la base de lo que se ha logrado hasta ahora en los casi dos años de reforma jurídica, esta realidad parece estar más cerca de cumplirse.
3 marcas de vino con infusión de cannabis para probar
Rebel Coast
Disponibles en toda California en variedad blanco y rosado, cada una con su cepa patentada de sativa o indica. Estas botellas contienen cuatro porciones de 10 miligramos de THC por vaso.
Haz click aquí para ver los productos de Rebel Coast
House of Saka
Actualmente disponible en California como vino espumante y rosado (incluyendo una versión enlatada del burbujeante). Estos vinos se elaboran a partir de una mezcla parecida al champán de uvas Pinot Nnoir, Pinot Meunier y Chardonnay de Napa Valley. Cada botella contiene cinco porciones, cada una con 5 miligramos de THC y 1 miligramo de CBD.
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Viv & Oak
Próximamente, en 2020, en los dispensarios de California, tanto en las variedades rojas como en las rosadas. Viv & Oak ofrece dos dosis distintas para atender a un público más amplio. Para el principiante, la opción de baja dosis incluye cinco porciones con 10 miligramos de THC cada una. Para lxs usuarixs más experimentados, ofrecen cinco porciones con 25 miligramos de THC y CBD cada una.
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Vía Weedmaps, traducido por El Planteo
Foto: Kelsey Chance en Unsplash
Fecha de publicación original: 24 de julio de 2022
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