¡Fumonas Fiestas! Te Traemos una Receta para Hacer Pan Dulce de Marihuana

Se vienen las fiestas, se termina el año, y llega uno de sus momentos más esperados: la temporada de comidas navideñas. Vitel toné, turrón, garrapiñada, sidra, pan dulce… ¡Qué fruta noble el pan dulce! Es realmente una pena que sólo se estile comerlo en diciembre. Si tan solo hubiera una manera de comerlo todo el año… como haciéndolo por nuestra cuenta. O atrevámonos a soñar más grande: ¿qué pasaría si pudiéramos hacer un pan dulce loco?

En El Planteo buscamos hacer tus sueños realidad, así que te traemos una receta para hacer un delicioso pan dulce de marihuana. Para esto, nos inspiramos en la receta de la ya legendaria Paulina Cocina, pero le agregamos un twist cannábico.

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Cómo hacer pan dulce de marihuana

Nuestra receta se dividirá en tres partes, pero no te preocupes, ninguna es demasiado compleja. Por un lado, tenemos la masa previa del pan dulce. Por otro, está el paso a paso del pan dulce en sí. Pero también tendremos que hacer nuestra manteca cannábica previamente: ese será el secreto para hacer nuestro pan dulce loco.

Ingredientes

Para la masa previa:

• 2 cucharadas de harina
• 1 cucharada de azúcar
• 1 chorrito de leche tibia (ni fría ni caliente)
• 30g de levadura fresca

Para el pan dulce:

• 500g de harina 000
• 2 huevos
• 200cc de leche
• 1 cucharadita de sal
• 60g de azúcar: Recomendamos agregarle ralladura de limón y naranja (proporción: 2 naranjas y 2 limones para 250g de azúcar). También pueden extenderse a 100g si les gusta más dulce todavía.
• 80g de manteca cannábica
• 1 cucharadita de esencia de vainilla
• Esencia de azahar o de panettone (opcional: no a todo el mundo le gusta)
• Relleno: Dependerá de tus gustos, puede ser fruta abrillantada, nueces, almendras, pasas (protip: remojarlas en cognac la noche anterior), quinotos en almíbar, trozos de chocolate, mantecol… ¡opciones no faltan!

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Para el glaseado:

• 2 cucharadas de azúcar impalpable
• Agua
• Limón

Para la manteca cannábica:

• 100g de manteca
• 1,5g de marihuana

Cómo hacer manteca cannábica

En este artículo te contamos varias formas de hacer manteca de marihuana, pero a continuación te dejamos sólo una de ellas.

Lo primero y principal a la hora de cocinar con cannabis siempre será la descarboxilación. Este es el proceso por el cual se activan los cannabinoides de la planta, gracias a la aplicación de calor. Sin este paso, no podrás disfrutar del efecto del THC que probablemente estás buscando a la hora de cocinar con marihuana.

¿Cómo descarboxilamos marihuana? Te dejamos un paso a paso para hacerlo en el horno, pero también puedes probar el método baño maría, y hasta con una freidora de aire. Y si vapeas, ¡se puede usar el material ya vapeado para cocinar!

• Picamos los cogollos, pero no demasiado: no deben quedar pulverizados. Recomendamos desmenuzarlos con la mano en vez de usar un picador.
• Esparcimos la marihuana sobre papel manteca para hornear en una bandeja para horno.
• Precalentamos el horno a 105°C (o 220°F), colocamos la bandeja en el horno y dejamos calentar durante 30 minutos.
• Cuando el cannabis haya cambiado de color y esté marrón claro en vez de verde, podemos quitarlo del horno. ¡Ojo! Su consistencia será más quebradiza.

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Ahora que tenemos nuestra marihuana descarboxilada, podemos agregarla a la manteca. Recomendamos una proporción aproximada de 1,5g de porro por cada 100g de manteca: se puede ir probando según la dosis que te quede más cómoda. Pero cuidado: cuando hablamos de comestibles de cannabis, menos es más. Siempre se puede seguir comiendo si no sentimos el efecto, pero si comemos demasiado, nos podemos meter en un problemón.

Para hacer nuestra manteca cannábica, hay que seguir los siguientes pasos:

• Derretimos la manteca en una sartén o una olla.
• Vertemos la marihuana descarboxilada sobre la manteca derretida.
• Dejamos la mezcla a fuego bajo durante 45 minutos, revolviendo cada tanto.
• Quitamos la manteca del fuego y la dejamos enfriar.
• Con un filtro o bolsa de tela, colamos la manteca, separando la materia vegetal de la mezcla final. ¡Cuidado con la temperatura! También se puede dejar sin colar: el efecto psicoactivo será mayor, pero esto afectará el sabor de tu comida.

Ahora sí: tenemos nuestra manteca loca, y es el momento que todxs estábamos esperando. A continuación, una receta para hacer pan dulce de marihuana.

Cómo hacer el pan dulce, paso a paso

• Primero, vamos a hacer la masa previa. Colocamos todos los ingredientes mencionados en un bol y los mezclamos bien con una cuchara. Luego, los tapamos con un repasador (también puede ser un film) y los dejamos levar unos 15 o 20 minutos, hasta que duplique su volumen.
• Mezclamos la harina, el azúcar y sus ralladuras de limón y naranja en un bol grande. Hacemos un hueco en el medio, donde ponemos los huevos, la manteca loca, la leche tibia, la masa previa ya levada y la esencia de vainilla. Alrededor del hueco, espolvoreamos la sal. Luego, mezclamos desde el centro hacia afuera (con las manos) hasta conseguir un resultado homogéneo.

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• Sacamos la masa del bol y amasamos 15 minutos. Sí, 15 minutos: ni más ni menos. Debería quedar una masa tierna.
• Tenemos que tomar una decisión: ¿queremos un pan dulce de 1kg o dos de 500g? En el segundo caso, dividimos nuestra masa en dos bollos. Tapamos con el repasador y dejamos levar 30 minutos.
• Aplastamos la masa (esto le saca el gas) y la estiramos en la mesada, formando un cuadrado. En el centro colocamos nuestro relleno, hacemos un rollo y seguimos amasando hasta que todos los ingredientes se integren bien. ¡Cuidado con no romper la masa!
• Colocamos la masa en su molde, lo tapamos con el repasador y dejamos levar una hora más. La masa tiene que levar tanto que se asome por encima del molde. Si no usamos molde, podemos poner papel manteca o aluminio entre el pan y la fuente para que no se queme.
• Horneamos nuestra creación a 180°C por 30 o 40 minutos, o hasta que se ponga dorada. Luego la sacamos del horno y dejamos que se enfríe.
• ¡Es hora de hacer el glaseado! Para esto, mezclamos el azúcar impalpable con un ínfimo chorrito de agua y un par de gotas (2 o 3) de limón. Batimos bien y bañamos el pan dulce. ¿No te gusta o no tenés ganas de hacer el glaseado? No hay drama: con espolvorear con azúcar impalpable o pintar arriba con huevo alcanza.
• ¡Listo! Sólo queda disfrutar.

¡Cuidado! Sobre los peligros de los comestibles

No podemos despedirnos sin una última consideración: mucho cuidado al comer marihuana. Sin dudas, tu pan dulce estará delicioso y será muy difícil parar de comerlo cuando empieces. Ese es uno de los grandes peligros de la cocina cannábica: que te salga demasiado deliciosa y termines con tremenda pálida.

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El lema “empezar de a poco, ir despacio” será clave para tu experiencia. Recomendamos probar un poco y esperar a ver qué efecto produce. Otra vez: siempre se puede comer más, pero una vez que te pasaste con la dosis, las cartas ya están echadas.

También se puede usar menos marihuana en la receta: cuando ganes experiencia en la cocina, podrás calcular mejor la dosis perfecta para tu cuerpo. La paciencia y la perseverancia serán tus mejores amigas.

Esperamos que con estas consideraciones pases un excelente rato comiéndote tu pan dulce cannábico. Y si te dan ganas de probar otras cosas, tenemos un montón de recetas flasheras que te pueden interesar. ¡Felices fiestas!

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