Básicos del Cannabis: Qué Es la Marihuana
En este artículo, te contaremos todo sobre la marihuana. ¿Listo?
¿Qué significa cannabis o marihuana?
Según la clasificación y definición científica del cannabis, tanto el cáñamo como la marihuana forman parte de la familia de las Cannabáceas y ambos se clasifican además como Cannabis sativa L. Como tal, ambos son cannabis.
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En los Estados Unidos, el término “cáñamo” o “hemp” se utiliza para describir una planta de cannabis que no produce más de un 0,3% de THC, que es la molécula que causa los efectos eufóricos y embriagadores asociados con la marihuana de uso adulto. La clasificación no tiene en cuenta ningún otro cannabinoide. Por lo tanto, si una planta produce un 20% de CBD y sólo un 0,29% de THC, se la sigue considerando legalmente como cáñamo.
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Foto: semillas de cannabis por Gina Coleman/Weedmaps
¿Para qué se usa la marihuana?
El cáñamo tiene muchos usos. Sus fibras se pueden usar para lienzo, papel, cuerda y otros textiles. Además, es un biorremediador increíblemente eficiente (extrae sustancias tóxicas del suelo mientras crece), y sus astillas se emplean cada vez más como material de construcción y como alternativa a la fibra de vidrio. Las semillas de cáñamo se han utilizado durante mucho tiempo en muchas culturas por sus beneficios nutricionales para los seres humanos y otros animales. Ahora también están siendo exploradas como fuente de biocombustible. Y las flores de cáñamo son ahora muy populares para la producción de aceites ricos en CBD. La parte de la flor también puede ser empleada como una alternativa al tabaco para fumar.
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Se han creado muchas leyes basadas en esta definición porcentual del cáñamo. Es el nivel de THC que la variedad de la planta produce lo que la diferencia de la variedad intoxicante de cannabis, “marihuana”, y permite su clasificación legal como un cultivo de mercancía.
En EEUU, “marihuana” es un término utilizado en referencia a la variedad de cannabis que produce más de 0,3% de THC. Existe una asombrosa diversidad de moléculas que las plantas de esta categoría legal son capaces de producir. Entre ellas se encuentran el cannabidiol (CBD), el cannabigerol (CBG) y el cannabicromeno (CBC). Se valora a estos cannabinoides por sus propiedades medicinales.
De hecho, la marihuana produce más de 100 cannabinoides únicos que imitan los compuestos producidos en el cuerpo humano. Estos cannabinoides de origen vegetal, o fitocannabinoides, pueden actuar en lugar de los cannabinoides endógenos del cuerpo, o endocannabinoides, cuando el cuerpo experimenta una deficiencia en su sistema endocannabinoide.
Foto: Gina Coleman/Weedmaps
Las variedades de cannabis, comúnmente denominadas “cepas”, también producen terpenos, las moléculas aromáticas que son el ingrediente principal de los aceites esenciales producidos por muchas especies de plantas. Las variedades de cannabis tienen perfiles terpenos únicos, que determinan el aroma y el sabor de la flor.
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Aunque las investigaciones siguen en curso, sabemos que los terpenos pueden potenciar o alterar los efectos psicológicos y fisiológicos de los fitocannabinoides. Cuando se consume cannabis de planta entera, hay una interacción única entre todas las moléculas que parece tener un beneficio médico superior en comparación con el consumo de moléculas aisladas. Este fenómeno se conoce como el efecto séquito.
El cultivo de cannabis
El cannabis es un cultivo versátil que puede crecer en muchos climas diferentes. Es una planta anual amante del sol que prospera en diversas condiciones, dependiendo de la variedad, de ahí su designación común de “hierba”.
Puede ser masculino (macho) o femenino (hembra), con sus órganos reproductivos. El estaminante masculino (estambre) y el pistilado femenino (pistilos) suelen aparecer en diferentes plantas. En presencia del polen de un macho, la hembra comenzará a producir semillas. En los raros casos en que los rasgos sexuales comparten una planta, se conoce como hermafrodita.
El cultivo de cannabis a partir de una semilla comienza con la germinación, proceso mediante el cual la semilla “brota” y luego se nutre en un material de partida, que puede variar, desde el suelo hasta la lana de roca. En esta etapa, la planta se considera una plántula.
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Para lograr una mayor uniformidad, algunxs cultivadores comienzan con clones, que son esquejes de una “planta madre” de cannabis que se ha mantenido en estado vegetativo. Los clones son copias genéticas de la planta madre y mostrarán patrones de crecimiento y floración más predecibles, así como perfiles cannabinoides y terpenos, si se cultivan en las mismas condiciones.
Foto: Gina Coleman/Weedmaps
El cannabis se cultiva típicamente en tierra, en interiores o exteriores, hidropónicamente en interiores o en condiciones de invernadero. Hay varios factores que afectan al éxito del crecimiento del cannabis, entre ellos: el clima, los nutrientes utilizados, la calidad del agua y la consistencia del riego.
El ciclo de luz al que se expone una planta de cannabis durante su vida tiene un efecto marcado en el crecimiento de la misma, así como en la expresión de fitocannabinoides y terpenos. Además, al número de horas del día a las que la marihuana está expuesta a la luz determinará el tipo de crecimiento que experimentará la planta: el vegetativo (dedicado a las funciones de crecimiento y arquitectónicas) se produce con más de 16 horas de luz por día y el floreciente (dedicado a las funciones reproductivas) se produce cuando la luz se limita a 12 horas por día.
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Una vez que la marihuana se cultiva y florece con éxito, está lista para ser procesada. La flor debe ser secada y curada para su consumo o producción de concentrado. La planta recién cosechada también puede enviarse inmediatamente a elaboración para crear concentrados. Después de que el cannabis ha sido procesado de la manera deseada, está listo para el consumo.
Del mismo modo, una vez que el cáñamo ha sido trillado, está listo para ser utilizado como fibras, estopa, semillas y flores. El cannabis, sin importar la variedad, es realmente una planta de muchas funciones.
Vía Weedmaps, traducido por El Planteo.
Publicación original: septiembre 2020
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