Cómo Fumar Marihuana: Todas las Formas que se te Puedan Ocurrir, Explicadas

El mundo del cannabis es mucho más amplio e interesante que fumar un porro y ya. Consiste en un extenso abanico de diferentes rituales, experiencias y elecciones personales que variarán según cada usuario. Es por eso que no hay una sola forma de definir cómo fumar marihuana —de hecho, fumar no es la única forma de consumirla.

En un estudio sociológico llevado a cabo por Howard Becker, Cómo fumar marihuana y tener un buen viaje, el autor nos recuerda que el verdadero disfrute de la experiencia no está solo en el acto de consumir, sino en aprender a identificar cada sensación y cambio en nuestro estado mental. Para esto, saber bien el cómo y el cuándo será clave.

En un mundo donde sobra la desinformación y abunda el estigma social de quienes usamos marihuana, es fundamental saber cómo usarla responsablemente. Para un buen viaje, debemos ser conscientes de sus efectos y conectar tales sensaciones con la experiencia. Por eso, hoy nos decidimos a hablar de cómo fumar marihuana (más allá del clásico porro).

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Desde el papel al bong, la pipa, el vaporizador, el blunt, hasta bebidas, comestibles y más, hoy te contamos todas las técnicas que existen para usar marihuana, sus efectos, formas de uso y algunos consejos de reducción de daños.

Así, tendrás toda la información necesaria para identificar el método perfecto para ti y asegurarte un viaje seguro y divertido (¡y quedar bien con tus amigxs!).

Arranquemos…

Fumar porro: La forma clásica

Tradiciones sí las hay, y la de picar tu cannabis, volcarlo en un papelillo y enrollarlo para fumarlo es la reina de ellas en el mundo marihuanero. Esta famosa técnica es conocida como porro (churro, charuto, fino, bareto, canuto, troncho, y podría seguir), y es todo un arte que merece paciencia y atención: no todxs saben armar un buen porro.

Cuando se hace bien, permite una experiencia suave y continua que es fácil de realizar, rápida y que se adapta a casi cualquier situación. Además, permite dosificar gradualmente el efecto, brindando más control sobre la intensidad del viaje.

¿Cómo armar un porro? 

Para armar un porro necesitarás:

• Cannabis (al menos 0,5 gramos)
• Papel de liar (papelillos o sedas)
• Filtro (puedes comprarlos hechos o utilizar algún pedacito de cartón, no muy duro ni muy blando)
• Picador o tijeras

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Paso a paso para armar un porro:

• Prepara la marihuana: Pica bien tu cogollo en el picador o recórtalo lo más que puedas con las tijeras, asegurándote de que esté libre de ramitas y semillas.
• Arma el filtro: Si no tienes filtros prearmados, utiliza el pedacito de cartón y enróllalo en espiral o en forma de M.
• Coloca la marihuana en el papel: Distribuye el cannabis uniformemente y coloca el filtro en uno de los extremos.
• Enrolla el porro: Enrolla el papel firmemente y sella humedeciendo la línea de pegamento.

Aquí te dejamos un práctico video para que no te quepan dudas:

Para aumentar la potencia de tu porro, puedes agregar hachís u otros concentrados, mezclar variedades de cepas, o incluso incorporar tabaco u otras hierbas para suavizar la combustión y el sabor.

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Armar un porro es una mezcla de técnica y arte; puedes darle cuantas formas quieras para experimentar el proceso y la fumada. Pero aunque es la forma más conocida de fumar mota y, probablemente, la más fácil, no es la única…

Cómo fumar marihuana en bong

Para lxs amantes de los subidones intensos, el bong es una excelente opción. Un bong es una pieza de cristal o plástico de forma cilíndrica que permite fumar mota sin la irritación pulmonar del porro clásico. ¿Cómo? Porque son dispositivos de agua.

El agua ayuda a filtrar calor y alquitrán, reduciendo impurezas, y hace que el humo no lastime tanto como al fumar un porro. Además, la experiencia será más potente.

Imagen por Christopher Thomas, CC BY-SA 3.0, via Wikimedia Commons

Para esto, necesitarás cannabis, un bong (preferentemente de vidrio ya que preserva el sabor), agua y un encendedor. Las instrucciones de uso son las siguientes:

1. Llena el bong con agua hasta que el vástago (número 4 en la imagen) quede sumergido.
2. Pica tu cannabis y colócalo en la cazoleta (número 3).
3. Con el encendedor, enciende la flor e inhala por la boquilla (número 1) lentamente. Sentirás como el agua empieza a burbujear.
4. Retira la cazoleta e inhala el humo, manteniéndolo dentro por unos segundos.

Los bongs tienen un efecto más fuerte que el porro, porque permiten inhalar mayor cantidad de humo fresco. No obstante, algunos cannabinoides pueden quedar en el camino en el proceso de filtración.

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Son una opción ideal —y además, con mucho estilo— para una reunión con amigxs en casa donde el ritual del pasamanos será una mezcla entre diversión y calidad. Aunque, si estás buscando algo un poco más portátil (los bongs suelen ser grandes y difíciles de transportar) una pipa también puede ser una excelente alternativa.

Cómo fumar marihuana en pipa

Entre las formas de fumar marihuana, además del porro y del bong, aparece la pipa. También de vidrio y con algunas ventajas económicas y de fácil transporte en comparación con el bong, la pipa es un pequeño dispositivo manual para fumar mota.

Consiste en un cuenco donde se coloca la flor y un carburador para regular el flujo de aire. Este clásico tiene, al menos, 4.000 años de antigüedad, y es muy populares por su disponibilidad y variedad. Las hay de varios tamaños, materiales y colores, para todos los gustos.

¿Cómo usar una pipa?

El proceso de uso es bastante simple:

1. Coloca una pequeña cantidad de cannabis en el cuenco.
2. Cubre el carburador (es el pequeño agujerito al costado de la cazoleta) y enciende el mechero cerca del cuenco mientras inhalas.
3. Mantén la combustión del cuenco, liberando el carburador al inhalar.
4. Exhala y repite hasta consumir todo el cannabis que has puesto en el cuenco.

Es clave que mantengas limpia tu pipa de vidrio para no continuar usándola y sentir el sabor a quemado del cannabis viejo que has fumado anteriormente.

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Para lavar tu pipa puedes utilizar una bolsa de plástico, llenarla de alcohol isopropílico y meter la pipa adentro. Déjala reposar hasta 12 horas, agitando después para remover la resina… ¡Y listo! Tendrás tu pipa limpia y lista para volver a usar.

Al ser mucho más pequeñas que un bong, son también más económicas, pero esta no es la única diferencia…

¿Cuál es la diferencia entre un bong y una pipa?

Este cuadro comparativo explicará mejor las ventajas y desventajas de cada opción, ayudando a elegir según las preferencias y necesidades de cada usuarix:

Como ves, cada opción tiene sus cosillas, pero aquí entra un tercer jugador que puede combinar la magia de ambos: el bubbler.

Bubbler

Un bubbler es una combinación entre un bong y una pipa. Similar al bong, usa agua para filtrar el humo, pero es mucho más pequeño y portátil, lo que facilita su uso en movimiento.

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El bubbler se destaca principalmente por dos características:

• Portabilidad: Es más compacto que un bong, un poco más grande que la pipa pero con el mismo efecto de filtrado de agua.
• Suavidad en el humo: El agua ayuda a enfriar el humo, reduciendo la irritación en la garganta, característica clave de un bong.

Consejo: Limpia tu bubbler regularmente, ya que su diseño más compacto hace que se acumulen residuos fácilmente.

¿Qué es el dabbing?

No, no hablamos del bailecito popular. El dabbing es otra forma de usar cannabis mediante extractos altamente concentrados, conocidos como “dabs”.

Un dab es una dosis de extracto de cannabis concentrado, como aceite de hachís de butano (BHO), rosin, shatter, budder o wax, entre otros. Estos extractos se calientan en una herramienta llamada “nail” (o clavo) y se inhalan a través de un equipo de dabbing. ¿Mucha data?

Puede sonar bastante profesional, y es que, en general, es una versión muy concentrada y potente que solo quienes tienen muchas agallas se animan a consumir. Pero no tiene por qué ser difícil de comprender ni de utilizar: veamos el proceso.

Para “dabbear” necesitarás:

• Equipo de dabbing o “dab rig”: Un dispositivo que parece una versión especializada de un bong.
• Nail o clavo: Es la pieza que calientas para poner el dab encima.
• Soplete o calentador: Necesitas calentar el nail (con un soplete, o usando un nail electrónico que calienta solo).
• Tapa: Se usa para evitar que el vapor se escape y puedas inhalarlo todo.

Tip: Existen versiones portátiles de estos equipos para que no sea tan complicado.

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¿Cómo se hace el dabbing?

1. Prepara una pequeña cantidad de dab (del tamaño de medio grano de arroz si es tu primera vez).
2. Calienta el nail con un soplete durante unos 30 segundos y deja que se enfríe un poco.
3. Coloca el dab en el nail mientras inhalas lentamente.
4. Cubre con la tapa para atrapar el vapor, inhala y exhala.

El dabbing tiene muchos beneficios, entre ellos que es más limpio que fumar una flor (porque se inhala vapor y no humo), mejor sabor (porque resalta los sabores naturales del cannabis) y rápido y eficiente (ya que en pocos segundos tendrás un subidón muy potente).

Nuestro mayor consejo es comenzar despacio; como es tan fuerte, menos es más. También querrás controlar la temperatura: no calientes demasiado para evitar un sabor amargo o compuestos dañinos.

El dab es un flash hermoso, pero no es para todo el mundo: si tienes problemas de salud o eres principiante, empieza despacio y con precaución.

Fumar cannabis en vaporizador: Una alternativa más suave

Para quienes deseen evitar la combustión, los vaporizadores son una excelente alternativa. Los vapes calientan el cannabis a temperaturas precisas, permitiendo que los cannabinoides se liberen sin quemarse.

Los vaporizadores, como bien lo dice su nombre, calientan la flor hasta crear vapor en lugar de humo. Al no quemar la flor, evitan el alquitrán y otras toxinas de la combustión.

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Además, son más discretos, ya que producen un humo más suave, y dan un efecto eficiente y rápido porque activan más compuestos del cannabis con efectos casi inmediatos —ideal para usuarixs de marihuana medicinal.

Hay tres tipos de vaporizadores:

• Vaporizadores de mesa: Estos son grandes y potentes, ideales para uso en casa. Tienen control de temperatura y calientan la flor o concentrado en una cámara, liberando el vapor por un tubo o una bolsa.
• Vaporizadores portátiles: Son compactos y discretos, funcionan con batería y permiten ajustar la temperatura. Además, son compatibles con concentrados y, en algunos modelos, también con flores secas.
• Vape pens: Más pequeños y portátiles, están diseñados para destilados de cannabis y aceites. Incluyen una batería y un cartucho reemplazable y son ideales para un consumo rápido y discreto.

Paso a paso para usar un vaporizador de marihuana

• Usa marihuana fresca: La calidad de tu experiencia dependerá de la frescura de la marihuana. La mejor hierba para vaporizar no debe estar ni demasiado seca ni húmeda. Tócala: debe sentirse ligeramente flexible sin desmenuzarse en polvo. La humedad adecuada permite que el vapor se forme mejor y tenga buen sabor.

• Pícala correctamente: Pica tu marihuana con un picador para aumentar la superficie de exposición al calor, ayudando a producir un vapor denso y sabroso. Asegúrate de no picar más de lo necesario, ya que la hierba picada se seca rápidamente.

• Ajusta la temperatura ideal: La temperatura es clave para obtener un buen vapor y depende de tus preferencias. Generalmente, lo ideal es vapear entre 180 y 210 °C. Las temperaturas bajas (180-190 °C) producen un efecto más claro y funcional, mientras que las más altas (200-210 °C) generan un subidón más fuerte y relajado.

• No te pases llenando la cámara: La cantidad de marihuana en la cámara afecta a la calidad del vapor. Llénala bien sin comprimir demasiado, ya que una cámara sobrecargada puede bloquear el flujo de aire y dañar el dispositivo.

• Precalienta el vaporizador: Al igual que un horno, el vaporizador necesita tiempo para alcanzar la temperatura adecuada. Deja que se precaliente antes de añadir la hierba para que se vaporice de manera uniforme y eficiente. Muchos dispositivos modernos se calientan en segundos, pero verifica siempre en el manual de tu vaporizador.

• Inhala, lenta y suavemente: Da caladas suaves y cortas en lugar de inhalaciones largas y profundas. Las caladas fuertes pueden hacer que restos de cannabis lleguen a tu boca y enfríen la cámara, afectando la calidad del vapor. Una inhalación lenta y constante es ideal para una experiencia suave.

• Evita la combustión: El objetivo de vaporizar es evitar la combustión y los compuestos tóxicos que produce. Mantente por debajo de los 210 °C y ajusta la temperatura para conseguir vapor sin quemar la hierba. Experimenta hasta encontrar el punto ideal según la humedad y la textura de tu material.

• ¡Cuida tu vapo!: Un buen mantenimiento es esencial para un rendimiento óptimo. Limpia regularmente tu vaporizador, revisa las instrucciones del fabricante y reemplaza las piezas cuando sea necesario. Cuidar tu vaporizador prolonga su vida útil y asegura una experiencia de calidad en cada uso.

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Siguiendo estos trucos, disfrutarás de una experiencia de vapeo eficiente, limpia y duradera. Pero, ¿qué pasa si no quiero inhalar cannabis? ¿Cómo puedo volarme sin fumar?

Comestibles: Cómo disfrutar de la marihuana sin fumar

Ah, la maravilla de los comestibles. Disfrutar la marihuana sin fumar es posible, y comer es un método que, muchas veces, supera a la fumada en términos de intensidad y subidón. Es por esto que su popularidad crece cada vez más entre quienes buscan alternativas para no fumar marihuana.

Los comestibles permiten que el THC y otros cannabinoides se absorban a través del sistema digestivo, lo que produce un efecto más duradero y potente. Al consumir comestibles, el efecto tarda más en sentirse (hasta 2 horas) y dura más tiempo, hasta 12 horas. 

Es por esto que hay que ir despacio: o sea, si te comiste un brownie loco y pasó media hora y no te pega: paciencia. No cometas el error de novato de seguir comiendo, porque los efectos pueden sorprenderte luego.

Para preparar comestibles de marihuana, deberás descarbolixar la marihuana, un proceso que activa sus compuestos mediante calor. Sin la descarboxilación, no hay efecto. Luego de esto, se puede licuar y mezclar en manteca o aceite para infundir en recetas. ¿Fácil, no?

Existen un millón (o incontables) de recetas locas, entre ellas:

• Brownies
• Gomitas
• Té
• Miel
• Chocolate

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Foto por Kindel Media vía Pexels

Pero no todas contienen THC. Muchas recetas pueden contener CBD, o una mezcla de ambos. Con THC, el resultado será eufórico y con un efecto psicotrópico; en cambio, las recetas con CBD brindarán una sensación de relajación sin euforia.

Si tienes experiencia en el tema y quieres acelerar el efecto de los comestibles, debes saber que consumir comestibles junto con alimentos grasos puede acelerar la absorción de THC y CBD en el cuerpo. Además, los comestibles sublinguales (caramelos duros, pastillas) también brindan efectos más rápidos.

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Te recomendamos que empieces con dosis bajas (2.5-10 mg de THC) y esperes para evitar el “mal viaje de comestibles”. La dosis elevada aumenta significativamente la intensidad y duración de los efectos.

Los efectos de los comestibles dependen de varios factores; por eso, un buen “set & setting” influirá bastante en la experiencia. Experimenta con responsabilidad y disfruta de los comestibles como una alternativa segura y duradera para el consumo de cannabis.

Bebidas infusionadas con marihuana

Otra de las maneras de consumir cannabis sin fumar es en forma de bebidas. Sí, leíste bien: hoy se puede beber marihuana (y quedar bien locx). Snoop Dogg y otros fieles a la cultura del cannabis eligen bebidas infusionadas con cáñamo, posicionadas como alternativas saludables y sin humo frente al alcohol (aunque también existen con alcohol), el tabaco o el porro.

Las bebidas de cannabis combinan THC y CBD ofreciendo un “subidón” sin necesidad de fumar, y son cada vez más populares. En 2021, las ventas de bebidas de marihuana aumentaron un 65% en varios estados de EEUU, con California liderando (¡más de 700 productos de bebidas de cannabis en el mercado!).

Comercializadas como bebidas sin resaca ni calorías adicionales, ofrecen efectos de concentración, relajación y bienestar, y pueden ser ideales para eventos sociales. Vienen en varias dosis, en general de 5 mg de THC para un efecto moderado, aunque pueden variar entre 2mg y 200 mg de THC por envase.

Y hay una diferencia clave entre las bebidas de cannabis y los comestibles: las bebidas están formuladas para una absorción rápida, o sea que sentirás el efecto a los 15-20 minutos, en comparación con los 30-90 minutos de los comestibles.

El genio Snoop ya lo dijo: “las bebidas cannábicas son geniales, no todos quieren fumar”. Pero ve despacio, como con todo, al probar por primera vez.

Cómo fumar marihuana en narguile

La narguile, shisha, cachimba o hookah es una pipa de agua usada para fumar mezclas de tabaco con sabor. Se remonta al siglo XVI y es muy parecida al bong, ya que filtra el humo a través del agua para una experiencia más suave, con la diferencia de que, como fuente de calor, utiliza carbón.

La narguile ofrece un sabor diferente en comparación con pipas, porros, o bongs, y algunos modelos permiten que varias personas fumen al mismo tiempo, ideal para compartir la experiencia.

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Lewis Carroll (author), retold by Edith Robarts, illustrator unknown, Public domain, via Wikimedia Commons

El hachís es ideal para usar en shishas, ya que se quema lentamente y proporciona un subidón potente, aunque los concentrados modernos también pueden funcionar, usando pequeñas cantidades para evitar que el dispositivo se atasque.

Paso a paso para fumar porro en narguile:

1. Limpia la shisha para eliminar cualquier partícula de polvo.
2. Llena un tercio del depósito con agua limpia y asegura los tubos para evitar fugas.
3. Llena el recipiente con una capa de mezcla de shisha, luego añade el cannabis picado y mezcla bien. No compactes demasiado para evitar obstrucciones.
4. Cubre el recipiente con papel de aluminio, haz pequeños agujeros y coloca las brasas encima.
5. Enciende las brasas usando un soplete o calentador eléctrico. Si notas sabor a quemado, retira algunas brasas para ajustar la temperatura.

Fumar marihuana en una narguile ofrece una experiencia única, ideal para compartir con amigxs y descubrir sabores y sensaciones diferentes.

Cómo fumar un blunt

El blunt es similar al porro, pero en lugar de un papel de armar tradicional, utilizas una hoja de tabaco, lo que agrega un toque de sabor distintivo. Su uso es popular en la cultura hip-hop, y se ha convertido en una de las formas más extendidas de fumar cannabis.

Los blunts suelen quemarse más lentamente, lo cual es ideal para sesiones largas, pero ten en cuenta que este método incluye tabaco. Por ende, si eres sensible a la nicotina, puede incrementar los efectos psicoactivos y provocar un subidón más fuerte.

Esto hace que el público marihuanero ame o rechace profundamente los blunts.

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Porros de rosa

Este método implica envolver el cannabis en pétalos de rosa secos, lo que le da al porro un toque floral y especial. Para ello, debes secar pétalos de rosa hasta que se tornen ligeramente flexibles y luego envolver la marihuana con ellos.

Es elegante (y hasta puede ser romántico), con un sabor suave, ideal para quienes buscan evitar la hoja del tabaco del blunt. Solo deberás asegurarte de que los pétalos de rosa sean efectivamente orgánicos y estén bien secos para evitar sabores amargos.

Cómo fumar marihuana en una manzana

Esta es muy de peli: un método improvisado que convierte una simple manzana en una pipa para una experiencia divertida y orgánica.

¿Cómo hacer una pipa con una manzana?

1. Haz un agujero en el centro de la manzana para formar el cuenco.
2. Crea un segundo agujero lateralmente para hacer el conducto de aire.
3. Coloca el cannabis en el cuenco y enciéndelo mientras inhalas a través del conducto.

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Y ¡voilá! Nunca tan fácil: no necesitas equipo extra, es rápido de hacer y el sabor de la manzana añade un toque fresco.

One-hitter (Pipa de una calada)

Un one-hitter es un tubo diseñado para contener suficiente marihuana para una sola inhalación. Vienen en una amplia gama de estilos, colores y materiales, como madera o vidrio. Estas pipas son portátiles, discretas y son una gran manera de obtener una dosis rápida de marihuana sin tener que guardar porros a medio fumar. Además, vienen en una caja, a menudo con forma de frasco, diseñada para el disfrute discreto de la marihuana.

Pipa steamroller

La principal característica de una pipa steamroller es el tamaño del agujero de la cazoleta. Debido a que este agujero es mucho más grande que el de otras pipas, proporciona mucho más humo. Las steamrollers no son para principiantes, o para quienes son sensibles al humo. Por sus características, permiten inhalar una dosis mucho mayor de cannabinoides. Y debido a la corta distancia de la pipa, se desperdicia muy poco humo, ahorrando así tu cannabis.

Bong de gravedad

El bong de gravedad utiliza la presión del agua para generar humo y, aunque parece elaborado, puedes hacerlo fácilmente con una botella de plástico y un balde de agua. ¿Cómo? Aquí tienes el paso a paso:

1. Corta una botella de plástico por la base y sumérgela parcialmente en agua.
2. Coloca el cannabis en la cazoleta y enciéndelo mientras levantas la botella, llenándola de humo.
3. Para inhalar, baja la botella mientras inhalas desde la boquilla.

La clave aquí es la succión, que permite inhalar grandes cantidades de THC rápidamente. Pero cuidado, es una opción potente y no recomendada para principiantes.

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Cómo fumar marihuana en una lata de gaseosa

Similar a la manzana (pero menos orgánica) una lata de gaseosa también puede transformarse en una pipa improvisada al hacer unos agujeros y colocar el cannabis en la parte superior.

Paso a paso:

1. Haz un agujero en el costado de la lata para usarlo como carburador.
2. Aplana la parte superior de la lata y perfora algunos agujeros donde pondrás el cannabis.
3. Enciende y fuma desde la boquilla de la lata.

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Es fácil encontrar una lata de gaseosa, ¿no? Este método es accesible y rápido de armar, ideal para una emergencia (énfasis en emergencia, porque el aluminio puede desprender toxinas al calentarse, así que sólo debe usarse muy de vez en cuando).

Cómo fumar marihuana en máscara de gas

La máscara de gas es un método excéntrico y particular que consiste en una máscara con una cámara conectada donde se coloca el cannabis. Al encenderlo, el humo queda atrapado en la máscara, rodeando la cara del usuario.

Lo bueno de este método es que el humo se mantiene dentro de la máscara, creando una suerte de cápsula e intensificando el efecto (si está bien cerrada). Es perfecta para un subidón fuerte y rápido.

Thai Stick

Los thai sticks proporcionan una buena dosis de cannabis, gracias en parte al proceso de curación que requieren. Este método de fumar marihuana ha existido durante siglos, y necesita dedicación pero da un resultado impresionante, especialmente gracias al proceso de curado que aumenta la potencia de la marihuana.

Típicamente, los cogollos secos se colocan en un palillo del tamaño de un cepillo de dientes, cubierto de aceite de hashish. Luego, el palo entero se envuelve en hojas frescas de marihuana y se empapa con más aceite. El palo se cura durante una semana o incluso meses.

Cáliz de vapor jamaicano o Chílum

Se dice que estos dispositivos orgánicos son los primeros y originales vaporizadores. Hoy, son utilizados por la cultura rastafari, pero su origen es hindú. Con el cáliz de vapor jamaicano, vapeas tu marihuana con palos de bambú, cocos y carbones calientes en lugar de electricidad.

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Foto vía Cannayogaliving

El cáliz de vapor consta de cuatro partes básicas:

• Coco: Comparable con la cavidad de un bong. Su contenido líquido ayuda a filtrar el vapor que se produce en el bowl para obtener caladas más suaves.
• Cutchie: El ‘cutchie‘ es un tubo de arcilla que se asemeja al bowl o cavidad de un bong grande. Esta parte del cáliz de vapor sostiene la flor sobre el tallo inferior.
• Tubos de bambú: El tallo inferior y la boquilla de un cáliz de vapor están hechos con dos tubos de bambú. A diferencia de los bongs típicos, el cáliz tiene el tallo inferior y el bowl situados exactamente encima de la cámara y también tiene una boquilla que sale desde un lado del coco.
• Rejilla de arcilla: Descansa sobre la flor y tiene muchos agujeros diminutos. Su función es limitar el contacto directo y la combustión del cannabis, mientras sirve de base para que el carbón queme.

¿Qué hacer mientras fumas un porro?

Ya conoces todas (o casi todas) las formas de usar marihuana, ahora toca disfrutar. Se nos ocurrió compartirte una pequeña lista de actividades que pueden mejorar el viaje, como:

• Dar un paseo
• Ver una película
• Jugar videojuegos
• Escuchar música
• Escribir (¡que fluya la creatividad!)
• Dibujar o pintar
• Darle un capricho a tu paladar y experimentar comidas ricas
• Conectar socialmente (si eres de esos)
• Limpiar y organizar tareas de la casa
• Tener sexo
• Hacer yoga
• Aventurarte fuera de casa

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Estas son solo algunas de las recomendaciones que harán tu experiencia más agradable y que podrán ayudarte a evitar algunos efectos secundarios que suelen venir con la fumada cuando no estás familiarizado con la planta o cuando has fumado de más, como paranoia, ansiedad o miedo.

Claro está que todas dependerán de qué te guste hacer a ti, particularmente, cuando estas voladx. No todxs disfrutamos de lo mismo, por lo cual cada viaje será único, tan único como cada uno de nosotros.

Cómo fumar marihuana de forma segura

Así como cubrimos lo bonito y divertido de esta práctica, es también importante considerar algunos consejos para fumar marihuana de forma segura y placentera. Entre ellos destacamos:

• Empezar despacio: Si no tienes mucha experiencia en el tema, empieza con pequeñas cantidades y espera a ver los efectos. Esto te ayudará a entender mejor tu cuerpo y tus gustos, acumulando experiencia para que cada viaje sea mejor con el tiempo.

• No mezclar: Evita combinar cannabis con otras sustancias; ya de por sí es un viaje potente y puede ser muy interesante y divertido, no es necesario sumarle otros efectos.

• No conducir: Entre las principales precauciones al fumar marihuana está el conducir. Nunca manejes bajo los efectos del cannabis.

• Almacenamiento seguro: Mantén tu cannabis bien guardado y lejos de niñxs y mascotas.

• Compra regulada: Adquiere productos en dispensarios con licencia, si tienes algunos en tu zona. Si este no es el caso, averigua bien a quién le estás comprando y qué es lo que estás comprando.

• Regula las cantidades: En casi todas las secciones cubrimos lo mismo: no te pases. Un viaje de marihuana puede ser fantástico si sabes cómo llevarlo, no te confíes 100% y presta atención a lo que haces y cómo lo haces. El consumo responsable es el mejor consumo.

Cómo elegir el método de consumo de cannabis adecuado

Cada método de consumo ofrece experiencias y efectos únicos, por lo que elegir el adecuado depende del tipo de experiencia que busques.

Si buscas métodos rápidos e intensos con subidones inmediatos, un porro, un blunt, una pipa o un bong cumplirán con la función. Si quieres estar relajado en casa con amigxs o mirando una peli, el bong puede ser una genial adición al plan, pero si piensas salir y llevar tu marihuana contigo, quizás una pipa más transportable o un blunt serán mejores compañeros.

Si no quieres fumar y buscas evitar la combustión para una opción más suave en tus pulmones, el vapeo será la respuesta. Además, ofrece discreción (produce menos olor) y control sobre la temperatura, permitiendo ajustar el nivel de efecto deseado.

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Si además de una alternativa sin humo, buscas experiencias prolongadas, comer o beber cannabis proporciona efectos duraderos y potentes. Como se absorben por el sistema digestivo, los efectos tardan más en sentirse pero duran mucho más. Recuerda: siempre empieza con dosis bajas y ten paciencia, ¡tarda en pegar!

Si no eres tan principiante, seguro el dabbing habrá llamado tu atención. Esta forma avanzada y potente de consumir cannabis mediante extractos concentrados da un subidón intensísimo y rápido. Practica la técnica y aférrate al sillón para no salir volando.

Conclusión

Usar cannabis es todo una ciencia, y con la información adecuada, puede ser un experimento social de placer y satisfacción donde, como dice Becker, la clave está en conocer cómo y cuándo consumir.

No se trata solo de elegir un método por costumbre o conveniencia, pues cada forma de usar cannabis puede brindar experiencias distintas y adaptarse a diferentes momentos y necesidades.

Seguro al pensar en marihuana piensas: fácil, un porro. Pero como puedes ver, hay muchas más opciones que se adaptan de forma personalizada y única a cada usuarix. Ahora, entre tantos métodos, ¿cuál es el tuyo?

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